Los "dos tonos" con los que el Gobierno abordó el decepcionante crecimiento nulo que registró la economía en septiembre, dando cuenta de un preocupante estancamiento, llamó la atención de los especialistas.
Un verdadero balde de agua fría económico cayó sobre el Ejecutivo -y el país- ayer, luego de que el Banco Central informara que la actividad se expandió 0% en el noveno mes en comparación al mismo del año pasado y registró una caída de 0,8% respecto a agosto de este año. Una mala noticia que fue recogida como tal por el ministro de Hacienda, Mario Marcel, pero particularmente matizada por otros secretarios de Estado.
Para Marcel, y a ojos del consenso de los analistas y economistas, el desempeño económico de septiembre fue "muy decepcionante", con pobres números que no estaban en los pronósticos de nadie. Incluso, llevaron a que Marcel desechara la estimación que tenía Hacienda de un crecimiento de 2,6% para este año.
"No se va a cumplir", recalcó ayer el titular de Hacienda. Un reconocimiento llamativo para un economista reconocido por proyecciones certeras.
Sin embargo, el tono de Marcel no fue el mismo que utilizaron otros ministros al referirse al mismo tema. Por ejemplo, el titular de Economía, Nicolás Grau, llamó a tener "una perspectiva más amplia" de las cifras, asegurando que el tercer trimestre de 2024 acumuló un alza del PIB de 2,2% en doce meses, suavizando así el impacto de la cifra mensual de septiembre.
Mientras que la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, criticó a quienes han tenido una "mirada negativa respecto de los resultados que se esperan para el país", análisis que -a su juicio- no reflejarían la realidad. "Se esperaba que decreciéramos", sostuvo la ministra, por lo que destacó que la economía esté, aunque sea tímidamente, expandiéndose.
En esa línea, apuntó a los "agoreros del pesimismo, que en realidad, más que diagnosticar la realidad, tratan de construir una realidad discursiva para instalar un pesimismo que no está en nuestro país".
Con un tono similar, la vocera de Gobierno, Camila Vallejo, reiteró que más allá de lo ocurrido en septiembre, las cifras económicas en el país han sido un "tapabocas" para esos mismos agoreros a los que en reiteradas ocasiones el Presidente, Gabriel Boric, y otras autoridades de Gobierno han hecho alusión.
"Ellos se equivocaron rotundamente y siguen estando equivocados", subrayó Vallejo.
El cuestionamiento del tono
Sin embargo los economistas -o esos mismos "agoreros" a los que cuestiona el Ejecutivo- no están para nada de acuerdo con las cuentas más bien alegres que se interpretan de los dichos de Grau, Jara y Vallejo.
El ex ministro de Hacienda, Felipe Larraín, en primer lugar, reprochó que el Gobierno insista con los "agoreros del pesimismo".
"Eso no solamente deberían decírselo a los analistas de la plaza o a los economistas; por favor, veamos las predicciones del Banco Mundial, de la OCDE, del Fondo Monetario Internacional (FMI). ¿Serán esos también agoreros del pesimismo? Porque han dicho las mismas cifras que han planteado analistas internos", sostuvo a Radio ADN.
Más duro fue
Tomás Izquierdo, gerente general de Gemines. En conversación con
EmolTV, criticó directamente los dichos como los de Vallejo y Jara. "
Lo encuentro un poquito penoso, creo que acusa un poquito de ignorancia en estas materias por parte de algunos ministros políticos", afirmó.
"Evidentemente el ministro Marcel de verdad debe estar muy frustrado con esta situación, el resto de los políticos tratan de dar una imagen de que esto no es un drama, entre otras cosas porque no entienden mucho y entre otras cosas porque tratan de transmitir voluntaristamente, de esforzar un poco las expectativas de la población en una tendencia más optimista"
Tomás Izquierdo, gerente general de Gemines
"E
l ministro Marcel de verdad debe estar muy frustrado con esta situación. El resto de los políticos tratan de dar una imagen de que esto no es un drama, entre otras cosas porque no entienden mucho y entre otras cosas porque tratan de forzar un poco las expectativas de la población a una tendencia más optimista", añadió.
En su análisis, el ex miembro del Grupo de Política Monetaria (GPM) apuntó que la economía chilena no está mostrando signos de recuperación, en particular en el consumo de los hogares, que actualmente está "8,4% por debajo del que había en junio del 2022".
Asimismo, cuestionó la caída sostenida en la inversión y destacó que, al deteriorarse el mercado laboral, "el único que está tirando algo el carro es el aumento en las remuneraciones reales", aunque advirtió que esto no es suficiente para revertir las tendencias negativas de fondo.
La ciudadanía necesita "esperanza no tapabocas"
Alejandro Weber, decano de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián, se refirió a los problemas estructurales de la economía y sus efectos sobre la ciudadanía.
"Todos pueden tener sus propias opiniones, pero no sus propias cifras. No nos perdamos un segundo, estos resultados no son malos para el Gobierno, son malos para las personas", dijo Weber, aludiendo a los casi 885 mil desempleados y los 2,7 millones de trabajadores informales.
El ex subsecretario de Hacienda argumentó que aunque el Ejecutivo pueda intentar construir un relato optimista, la realidad económica "simplemente no se sostiene".
"Todos pueden tener sus propias opiniones, pero no sus propias cifras. No nos perdamos un segundo, estos resultados no son malos para el Gobierno, son malos para las personas"
Alejandro Weber, ex subsecretario de Hacienda
Para Weber, lo que la ciudadanía realmente necesita es "esperanza, no tapabocas. Esa esperanza se construye con trabajo duro, no con palabras bonitas o sin sustento".
Por otra parte, valoró los dichos de Marcel, calificando su tono como "prudente" y con "sentido de realidad". Por lo mismo, llamó al Gobierno a priorizar políticas de inversión y empleo que puedan aliviar la crisis en el mercado laboral.
La necesidad de una recuperación económica sostenida
A su vez, Sergio Lehmann, economista jefe del BCI, indicó que la controversia por las "declaraciones optimistas" son una distracción de los problemas fundamentales de la economía chilena.
"Me parece que hacer ese tipo de planteamientos busca abrir una polémica un tanto estéril, cuando lo cierto es que las cifras de actividad son evidentemente débiles, muy por debajo de lo que debiéramos esperar en un proceso de recuperación", sostuvo Lehmann, sugiriendo que el Gobierno debería enfocarse en medidas concretas que impulsen la inversión y entreguen señales de estabilidad.
"Me parece que hacer ese tipo de planteamientos busca abrir una polémica un tanto estéril, cuando lo cierto es que las cifras de actividad son evidentemente débiles, muy por debajo de lo que debiéramos esperar en un proceso de recuperación"
Sergio Lehmann, jefe economista del BCI
Lehmann también destacó que las proyecciones de crecimiento se basan en modelos económicos objetivos, por lo que no se trata de una postura "pesimista", sino de un diagnóstico que refleja la situación actual.
Además, remarcó que "las proyecciones de analistas se fundan en modelos econométricos. Hemos sostenido para este año un crecimiento del PIB más cercano a 2,3%, que más o menos da cuenta de lo señalado por el ministro Marcel".