El Presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, volvió este lunes al Palacio de Gobierno a continuar con su agenda en la sede del Ejecutivo desde que el miércoles pasado se le diagnosticó un cuadro de dengue, enfermedad que ha dejado en ese país cuatro fallecidos en lo que va del año.
Desde entonces, Abdo Benítez, de 48 años, estaba llevando una agenda "restringida" en Mburuvicha Roga, la residencia presidencial.
El senador Silvio Ovelar, del gobernante Partido Colorado, dijo, tras reunirse con el Mandatario, que "está evolucionando con respecto a su cuadro, pero evidentemente él no quiso dar más tiempo y vino al Palacio a trabajar y a conversar con sus colaboradores".
"Lo he visto bastante bien, es un ser humano como cualquiera de nosotros pero con un estado de evaluación muy favorable", añadió el legislador.
A Abdo Benítez le diagnosticaron un cuadro de dengue del serotipo D4, predominante en Paraguay y el menos letal, que se presenta con fiebre pero sin signos graves como dolores abdominales o sangrado.
Cabe recordar que el Mandatario interrumpió su agenda de actividades el pasado martes en el departamento de Alto Paraná debido a un dolor de cabeza y malestar. Tras esto, el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, le recomendó varios días de reposo médico al Presidente, con remedios y una "hidratación generosa".
Paraguay se encuentra sufriendo una epidemia de dengue que tendrá su peak más alto en febrero, según alertó la cartera sanitaria.
Hasta hoy hay cuatro muertes confirmadas por la enfermedad en lo que va del año, pero se está a la espera de que se complete el análisis de una veintena de fallecimientos con síntomas de la enfermedad. La mayoría de los casos de dengue en el país provienen del área metropolitana de Asunción y del departamento Central.
Según el ministerio, hay 2.200 casos confirmados de dengue, y un promedio semanal de notificaciones de casos probables en torno a los 8.400 casos.
