El Gobierno surcoreano aseguró este martes que no ha detectado "actividad inusual" en Corea del Norte, quitando peso a los reportes que hablan sobre una supuesta operación de corazón del líder Kim Jong-un e incluso apuntan a que estaría "grave".
En un mensaje de texto remitido a los medios, el portavoz presidencial de Seúl, Kang Min-seok, aseguró que no hay "nada que confirmar" acerca de esas informaciones y que las autoridades sureñas no han detectado nada fuera de lo normal al norte del paralelo 38.
Poco antes, una portavoz del Ministerio de Unificación surcoreano, cartera encargada de los lazos con el Norte, había asegurado a Efe que "no hay comentario oficial" con respecto a lo publicado por el Daily NK, un diario con base en Seúl que cuenta con una amplia red de contactos en el país vecino, y la cadena estadounidense CNN.
La primera información cita a una sola fuente que asegura que el líder norcoreano (cuya edad está entre los 36 o 37 años) "se sometió recientemente a un operación cardíaca" y que especula que la cirugía se debería al "tabaquismo, la obesidad y el sobreesfuerzo".
A su vez, CNN asegura que "EE.UU. está confirmando información con respecto a que el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, está en grave peligro después de una cirugía" sin aportar más detalles.
Por su parte, la fuente citada por Daily NK asevera que supuestamente a Kim lo habrían trasladado el 12 de abril de Pionyang a un centro médico del condado de Hyangsan, donde lo habrían intervenido y que el líder estaría ahora reposando al cuidado de los médicos en una residencia cercana.
No es la primera vez que se especula con el estado de salud de los líderes del régimen norcoreano ante el tradicional secretismo y fascinación que rodea a la familia Kim.
En 2014, Kim Jong-un estuvo ausente de los focos unos 40 días generando todo tipo de conjeturas antes de reaparecer cojeando (la inteligencia surcoreana aseguró finalmente que se operó de un tobillo).