Los primeros centros de votación de Nicaragua, en Managua, abrieron este domingo sus puertas antes de las 07.00 hora local (13.00 GMT), en unas elecciones en las que el actual presidente, Daniel Ortega, en el poder desde el 2007, busca su quinto mandato y cuarto consecutivo.
Las urnas fueron abiertas hacia las 06.38 hora local (12.38 GMT), con 22 minutos de anticipación respecto a lo programado, y uno de los primeros nicaragüenses en votar fue el canciller Denis Moncada, según imágenes de la televisión local.
En total, 3.160 centros de votación abrirán sus puertas hoy para las elecciones generales, en las que los ciudadanos elegirán al presidente y vicepresidente de Nicaragua, 90 diputados ante la Asamblea Nacional y 20 representantes ante el Parlamento Centroamericano.
Más de 4,4 millones de nicaragüenses están convocados para acudir a las urnas, ubicadas en 13.459 Juntas Receptoras de Votos, en los 153 municipios del país.
En la contienda electoral participan el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), partido de Gobierno, así como el Partido Liberal Constitucionalista (PLC), el Partido Liberal Independiente (PLI), la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), Camino Cristiano Nicaragüense (CCN), la Alianza por la República (Apre), y Yatama (Hijos de la madre tierra, en lengua miskita), este último solamente en la costa Caribe.
El Consejo Supremo Electoral (CSE) recomendó a los votantes que siguieran las medidas ante la pandemia de covid-19, como lavarse las manos al ingresar a los centros de votación o utilizar mascarillas, aunque esto último no fue exigido.
Según la entidad, 15.000 efectivos del Ejército de Nicaragua y 16.665 agentes de la Policía Nacional resguardarán los comicios.
A lo largo del proceso electoral, además del arresto de varios dirigentes opositores, incluidos siete que aspiraban a la presidencia, las autoridades eliminaron tres partidos opositores y no invitaron como observadores a la Organización de Estados Americanos (OEA), ni a la Unión Europea (UE).
Movimientos opositores, organizaciones defensoras de derechos humanos, así como la OEA, la UE y Estados Unidos, han puesto en duda la legitimidad de las elecciones en Nicaragua.
Opositores denuncian nuevas detenciones previo a la votación
Por otro lado, al menos nueve líderes territoriales de la oposición fueron detenidos por la Policía Nacional antes de la votación, denunciaron las organizaciones Unidad Nacional Azul y Blanco y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia.
"Contabilizamos al menos ocho de nuestros liderazgos secuestrados por el régimen, en redadas ilegales, lo cual no hace más que reforzar el estado de sitio en el que el régimen de Ortega y Murillo ha colocado a la oposición", dijo la dirigente de la opositora Unidad Nacional, Alexa Zamora, en un audio, en el que confirmó los arrestos.
La Alianza Cívica, que fue la contraparte del Ejecutivo en unas mesas de negociaciones con las que se buscaba una salida a la crisis que vive el país desde abril de 2018, denunció, por su lado, la aprehensión de una líder territorial, cerca de la medianoche del sábado.
"En Nicaragua persisten el hostigamiento, vigilancia, amenazas, intimidación, acoso, ataques y detenciones ilegales arbitrarias de nuestros dirigentes municipales, departamentales y enlaces territoriales", señaló la Alianza.
Entre los detenidos están los líderes territoriales Yaser Mahumar Vado y Nidia Barbosa, de la Unidad Nacional y de la Alianza Cívica, respectivamente.
Los nombres del resto de líderes detenidos no fueron identificados públicamente por petición de sus familiares, explicó la Unidad Nacional, que confirmó que persiste la ola de capturas de opositores que inició en mayo pasado.
Hasta el 21 de octubre pasado, cuando fue detenido el presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), Michael Healy, y el vicepresidente de la patronal, Álvaro Vargas, se contabilizaban 39 líderes y profesionales independientes encarcelados en el marco de las elecciones.
Entre los detenidos están siete aspirantes a candidatos a la presidencia por la oposición, acusados, entre otros, por delitos que son considerados traición a la patria y de lavado de dinero.
El observatorio Urnas Abiertas, que da seguimiento a la violencia electoral en Nicaragua, registró 1.656 hechos violentos en el marco de las elecciones desde octubre de 2020, incluyendo 120 en el último mes.