Cerca de dos horas duró la reunión entre la Presidenta Michelle Bachelet y los ex mandatarios.
Aton Chile
SANTIAGO.- Tras reunirse por cerca de dos horas con la Presidenta Michelle Bachelet, los ex mandatarios Eduardo Frei, Ricardo Lagos y Sebastián Piñera, expresaron por separado diferentes opiniones sobre el proceso constituyente impulsado por el Gobierno.
El primero en tomar la palabra fue Frei, quien indicó que "creo que nadie en Chile está en contra de un proceso de reforma constitucional", recordando que es un debate que se extiende por larga data.
Así indicó que él es autor de un proyecto trabajado desde el 2006 hasta el 2009, que fue presentado ante el Congreso y que hoy puso a disposición de Bachelet "para hacer un aporte concreto al debate que viene".
A su juicio, es "interesante" la fórmula planteada por el Ejecutivo, en torno a escuchar e incluir la participación de la ciudadanía y que además el proceso se haga dentro de la institucionalidad.
Frei en contra de la Asamblea Constituyente
Si bien Frei aseguró que "estamos dispuestos a colaborar, a ayudar y por eso creemos que ya esta Constitución es una camisa de fuerza que no sirve para el Chile de hoy", expresó sus reparos sobre uno de los mecanismos propuestos por el Gobierno para reformar la Constitución.
"En lo personal no soy partidario de la Asamblea Constituyente, porque creo que es un ejemplo internacional que ha sido negativo, se transforma en supra poder del Estado por sobre todos los otros poderes del Estado", precisó.
Lagos: Constitución no debe ser "ideológicamente sesgada"
Luego fue el turno del ex Presidente Lagos, quien junto con aludir a la positiva historia constitucional de nuestro país, aseveró que "la Constitución del 2005 fue un paso adelante respecto de lo que teníamos (…) porque hubo ese cambio el 2005 es posible iniciar el debate de hoy, que es actualizar y poner al día un cuerpo constitucional que pasaba y pasó el test de la democracia como lo dije en este Palacio de La Moneda el 2005”.
Acto seguido, Lagos recalcó que "lo que yo demandaría de la nueva Constitución, junto con discutir contenidos, sin perjuicio de lo importante que es discutir la forma en que se va a adoptar la nueva carta, es establecer con claridad que así como no me gusta una Carta Constitucional ideológicamente sesgada que impide a una mayoría aplicar sus puntos de vista cuando es elegida como tal. Así también me parece que tenemos que tener una Constitución que no sea ideológicamente sesgada en la otra dirección".
"Esperaría que en este debate ciudadano que se va a iniciar, haya claridad en la opinión pública en lo que implica una Carta Constitucional", afirmó.
Piñera critica proceso y acusa "incertidumbre"
Una postura mucho más dura expresó Sebastián Piñera, quien explicó que es "partidario de una reforma constitucional, participativa, consensuada e institucional que permita perfeccionar y no desmantelar la Constitución que hoy tenemos. De forma tal que una vez aprobada por el Congreso y después de un plebiscito ciudadano que permita darle legitimidad en su aprobación, pueda constituirse en un marco que nos dé estabilidad, confianza y certezas".
Esto pues Piñera acusó la propuesta hecha por el Ejecutivo "abre un largo e incierto proceso de discusión sobre la Constitución que se va a extender por muchos años, y que va a coincidir con las elecciones presidenciales, parlamentarias y presidenciales. Y que no aporta ninguna definición ni en cuento al contenido de fondo, ni a los mecanismos de reforma, todo lo posterga".
Y agregó que lo anterior, "sin duda provocará más desconfianza, más incertidumbre, más inestabilidad en la sociedad chilena y esos elementos van a agravar el estancamiento que afecta hoy a la economía chilena".
Finalmente, Piñera anunció que propondrá al bloque Vamos Chile que presente un proyecto de reforma constitucional "con contenidos claros y concretos, que permita en forma participativa y consensuada poder aprobar una nueva Constitución", agregando que esa de ser sometida luego a un plebiscito ciudadano.