Claudio Grossman, nuevo agente chileno ante La Haya.
El Mercurio (Archivo)
SANTIAGO.- Luego de días de rumores sobre la renuncia de José Miguel Insulza, la que hoy se confirmó, la Cancillería designó a Claudio Grossman como el nuevo agente de Chile ante la demanda presentada por Bolivia ante la Corte Internacional de La Haya para obligar al país a negociar una salida soberana al mar.
Según detalló el ministro de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, este nombramiento "es un reconocimiento ha su trabajo previo".
Grossman, experto en derecho internacional, se sumó en 2012 a los juristas que hicieron frente a la demanda marítima de Perú. Luego trabajó preparando la defensa chilena por la acción legal presentada por Bolivia en el equipo liderado primero por Felipe Bulnes y luego por José Miguel Insulza.
Decano emérito de American University Washington College of Law (AUWCL), reside en la capital de Estados Unidos, donde es un reconocido jurista. De hecho es miembro de la junta directiva de la Asociación Internacional de Escuelas de Derecho en EE.UU.
El nuevo agente realizó su educación escolar en el Liceo Valentín Letelier de Santiago y en la escuela de derecho de la Universidad de Chile, donde se recibió en 1971. En agosto de 1980 obtuvo un doctorado en Ciencias del Derecho en la Universidad de Ámsterdam, presentando una tesis titulada "El principio de no intervención en la Organización de Estados Americanos".
Grossman integró la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) entre 1993 y 2001 y hasta el año pasado fue presidente de la Comisión de las Naciones Unidas contra la Tortura.
En la edición de enero de 2013, la revista The National Jurist de los Estados Unidos lo ubicó entre las personas más influyentes de la educación jurídica, donde se menciona que Grossman se ha transformado "en un líder del derecho internacional y los derechos humanos".
Además de lo anterior, desde 2012 representa ante la CIDH a la familia del senador Jaime Guzmán, asesinado en 1991 por el Frente Patriótico Manuel Rodríguez, quienes buscan la extradición desde Argentina de uno de los principales sospechosos del crimen, Galvarino Apablaza, quien reside en ese país.
