José Miguel Pérez, El Mercurio
SANTIAGO.- Varias serán las actividades que el Papa Francisco realice en el país tras su llegada el próximo lunes 15 de enero. La más esperada es la misa masiva que hará el día siguiente en el Parque O'Higgins, evento para el que se espera la asistencia de cerca de 400 mil peregrinos y principal razón por la que se declaró feriado para la Región Metropolitana ese día.
Entre las actividades, el miércoles 17 de enero, luego de su visita a Temuco, se espera que el Pontífice sostenga un encuentro con los jóvenes en el Templo Votivo de Maipú a las 17:30 horas, donde hará un discurso.
A pesar de que para ese evento hay disponibles cerca de 40 mil entradas gratuitas, la Comisión Nacional a cargo de la visita papal señaló que la descarga online de éstas ha estado lenta.
Así lo consignó el director de Comunicaciones del organismo, Felipe Herrera, quien afirmó que para esa actividad aún "quedan entradas. Hay un gran número entregada, los jóvenes han estado tal vez más flojos para descargar. Nosotros hemos llegado a muchas partes con las entradas y se agotan cuando las llevamos físicamente, pero la descarga ha estado menos rápida".
Entre las razones que consideró Herrera para esta baja demanda de las entradas digitales mencionó el periodo de vacaciones que la mayoría de los escolares tienen en esta época del año, además de la costumbre de dejar las cosas para último minuto.
Por lo anterior, la Comisión está considerando abrir la convocatoria para personas de otras edades. "El encuentro es para los jóvenes, puede ser que en los próximos días pueda abrirse a otras personas, pero queremos darle de todas maneras la prioridad a los jóvenes", sostuvo Herrera.
Por su parte, el párroco de la iglesia Inmaculada Concepción de Vitacura, Sergio Cobo, aseguró a La Segunda que los jóvenes se han alejado de Iglesia sobre todo por la cultura actual. "Desde casi tres décadas que se ha intensificado una ola secularizante en Chile, donde el individualismo y el cuestionamiento hacia lo institucional y lo recibido desde la tradición (familiar por ejemplo) ha ganado terreno", comentó.
"Esto es un desafío enorme para la evangelización. Además, las graves situaciones de abuso de menores que han ocurrido en la Iglesia y la inoportuna e inadecuada manera de enfrentar estas situaciones ha significado un golpe de credibilidad de la Iglesia y su misión. Los jóvenes son muy sensibles a la coherencia y hemos fallado en eso", sosutvo.
A eso se suma que "el lenguaje de la Iglesia no es el adecuado para la cultura actual. Debemos buscar modos diferentes para llegar con un mensaje que haga sentido a los jóvenes de hoy en esta cultura, sin por eso traicionar la identidad del Evangelio".
