El panorama en la Clínica Alemana de Santiago.
El Mercurio
SANTIAGO.- Una inédita espera durante la noche se produjo en diversas clínicas de la capital, por parte de usuarios para adquirir la vacuna en contra de la fiebre amarilla, entre quienes viajarán en los próximos días a Brasil.
Hace una semana, la Organización Mundial de la Salud alertó sobre el brote en dicho país y recomendó a los turistas vacunarse con un mínimo de 10 días de anticipación al viaje para que la inoculación surta efecto.
A partir de entonces, a los puntos vacunatorios de Santiago comenzaron a llegar decenas de personas para obtener las dosis, las que se agotaron rápidamente. Así ocurrió el sábado con las tres mil que liberó el Instituto de Salud Pública (ISP).
Ayer, desde temprano, incluso de madrugada, otros cientos de viajeros coparon las esperas de clínicas. Muchos llegaron con cojines, chales y comida.
