El presidente del PS, Álvaro Elizalde, ha estado en el centro de los cuestionamientos por los roces que ha sostenido el partido con sus socios.
Agencia Uno.
SANTIAGO.- El miércoles 4 de julio, la sala del Senado tenía que resolver la nominación de la abogada Ángela Vivanco a la Corte Suprema. Antes de la votación, se esperaba que todos los senadores de centroizquierda aprobaran la postulación realizada por el Gobierno, pero a último minuto, los senadores del PS, con la excepción de José Miguel Insulza, la rechazaron.
La decisión generó un profundo quiebre en la oposición. Los senadores de la DC, quienes han sido los principales impulsores de restablecer los contactos con sus ex socios de la ex Nueva Mayoría al interior de su partido, reprocharon el hecho a sus pares socialistas. En tanto, desde el PPD ven con incomodidad cómo el PS sigue tomando caminos propios.
De hecho, el ex presidente de ese partido y actual senador, Jaime Quintana aseguró este domingo que "el PS rompió un puente para asegurar otro puente: el Frente Amplio". Mientras el líder socialista, Álvaro Elizalde, desdramatizó el hecho y aseguró que "nunca hubo una real voluntad de los senadores socialistas para apoyar la nominación".
A ello se sumó la molestia del PPD por la manera en cómo el presidente del Senado, Carlos Montes (PS), ha estado manejando la corporación en algunos aspectos, como en su interés de hacer públicos los informes de las asesorías externas desde 2015, pese a que existiría un acuerdo de toda la oposición para que se publicaran solo desde marzo pasado.
Con esos dos hechos sobre la mesa, el PPD y la DC decidieron suspender la reunión de coordinación de los senadores opositores, algo que el PS intentó revertir el jueves y viernes pasado, luego de las reuniones formales que sostuvo la mesa directiva con los nuevos presidentes de ambas colectividades, Heraldo Muñoz y Fuad Chahín, respectivamente.
Sin embargo, ese no ha sido el único episodio en el que el PS ha tomado distancia del resto de sus socios. Otro ejemplo se dio a semanas de que el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera asumiera el cargo: Ante el llamado del Mandatario a generar mesas de trabajo para llegar a acuerdos en cinco materias, los socialistas se restaron.
En cambio, desde el PPD y la DC declararon libertad de acción. Así fue como los senadores Ricardo Lagos-Weber, Felipe Harboe y Carolina Goic se sumaron a las comisiones de infancia y seguridad pública convocadas por el jefe de Estado, algo que Insulza intentó hacer, pero la mesa encabezada por Elizalde se lo prohibió.
La decisión dejó al PS en la oposición dura, incluso más que el propio Frente Amplio, el cual también participó con el diputado Gabriel Boric (MA) y el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, quienes accedieron al llamado de Piñera y se sumaron al trabajo en La Moneda. En tanto, la DC y el PPD apostaron por un perfil fiscalizador, pero dialogante.