SANTIAGO.- Este domingo, el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, anunció que se convocó a un paro nacional de advertencia para el próximo martes 28 de agosto.
El timonel del organismo explicó que la decisión se tomó en la asamblea nacional de la gremial debido a que "la mesa de negociación que se instaló con el Colegio de Profesores (y el Gobierno) no va bien, no hay respuestas. No hay nada que podamos considerar satisfactorio en la mesa que se ha llevado con el subsecretario".
Y continuó: "Vamos a paralizar porque hay muchos problemas que se han expuestos en la mesa de negociación, la mayoría no son económicos, sino que tienen que ver con el desarrollo educativo mismo, con el trabajo en la sala de clases, en mejorar la atención a nuestros niños".
Asimismo, agregó que "el Gobierno no ha mostrado voluntad de terminar con el agobio laboral, de establecer un funcionamiento más democrático dentro de las escuelas, de resolver problemas con la carrera docente, de atender a los graves problemas que se avecinan con la desmunicipalización".
En esa misma línea, Aguilar expuso que "esperamos que el Gobierno se dé cuenta que hay un conflicto que puede ir creciendo. El siguiente paso después de 24 horas, si no hay respuesta, es obviamente entrar a una paralización prolongada. Ojalá no lleguemos a eso, nosotros tenemos disposición para el diálogo (...) No estamos llamando a paro por deporte, hemos debido llegar a esto por la pasividad del Gobierno".
"Cinco meses de bingos, condones y de pequeñas humillaciones"
En tanto, el presidente del Colegio de Profesores también habló sobre la salida del ex ministro de Educación Gerardo Varela: "Las preguntas de todos (en la asamblea nacional) eran: ¿Por qué demoró tanto?, ¿qué pretendió el Presidente Piñera al nombre al señor Varela?, ¿cuál era el plan de nombrar a una persona que demostró una total falta de idoneidad y una lejanía con el mundo de la educación?".
Además, indicó que el otrora secretario de Estado "demostró impertinencia, desatino y no dejó nada. Fueron cinco meses y no quedó un proyecto de ley. Solo estuvimos cinco meses hablando de bingos, condones, de pequeñas humillaciones y otras frases desubicadas".
