SANTIAGO.- En noviembre próximo correspondía que se efectuaran las votaciones para elegir a la nueva directiva de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh). Sin embargo, las elecciones se postergaron hasta mayo del próximo año, debido a que los estudiantes realizan un proceso para refundar la federación, modificando sus estatutos.
En general, hay consenso en los distintos grupos políticos al interior de la universidad de que es necesario realizar cambios al funcionamiento de la federación.
Comentan que la idea se ha venido discutiendo en los últimos años, a raíz de hechos como la baja participación estudiantil en las elecciones y la pérdida de influencia en los temas nacionales. Pero que esto se habría precipitado con el episodio de la renuncia del anterior presidente, Alfonso Mohor, en medio de una polémica por el supuesto encubrimiento de un acoso laboral.
De "mesa integrada" a "mesa cerrada"
Si bien el proceso está en etapa preliminar y aún no comienza a funcionar el congreso que elaborará los nuevos estatutos, se ve que hay algunos temas que podrían dominar el debate.
Uno de los cambios que intentan promover algunos sectores es modificar la composición de la directiva de la FECh. En esa universidad –a diferencia del resto de la Confech– ésta funciona como "mesa integrada", esto es, que los distintos cargos de la directiva son ocupados por miembros de listas diferentes, dependiendo de la votación que obtengan. De esta modo, la lista más votada ocupa la presidencia, la segunda la vicepresidencia y así sucesivamente.
Aunque este sistema se creó para dar mayor pluralismo a la federación, los partidarios de reemplazarlo creen que, en la práctica, dificulta el funcionamiento interno de la federación.
Entre los partidarios de modificar este sistema y reemplazarlo por una "mesa cerrada" –en que una sola lista ocupa todos los cargos– está el Frente Amplio, que ha obtenido la mayor votación en los últimos años; y el movimiento "Vamos Construyendo", de izquierda revolucionaria, que obtuvo el segundo lugar en la última elección.
"Que tengamos una mesa integrada por diferentes organizaciones políticas termina siendo un problema. Hay una falsa idea de pluralismo que hace que muchas veces la federación no pueda avanzar, porque hay disputas al interior de la misma mesa. Muchas veces la federación se entrampa en discusiones que no debería. No es una pluralidad sana", afirma Matías Gallegos, vicepresidente FECH y miembro de "Vamos Construyendo".
También apoya esta idea la actual presidenta de la FECh, Karla Toro (Izquierda Autónoma), quien cree que "es importante que exista un proyecto político que logre guiar la federación y que se pueda cuajar en todos los cargos e impulsar un proyecto a largo plazo". Agrega que con el sistema actual "la democracia se hace solamente en términos formales, pero al final quien define para dónde va la federación siempre es la presidencia".
Apunta además el actual sistema "ha permitido que la misma Nueva Mayoría o el Partido Comunista puedan constantemente estar integrando la mesa de federación", pese a no obtener las primeras mayorías.
Una opinión distinta tiene el secretario ejecutivo de la FECh, Juan Carlos Bustos, de la centro derecha universitaria, quien cuestiona "los intereses de ciertos grupos de monopolizar los cargos" en la FECh. "Yo creo que este mecanismo, donde distintas personas pueden participar en la mesa de la federación, la hace más cercana a los estudiantes, porque ven que su voz puede ser escuchada y no sólo monopolizada por un grupo", señala. Y advierte que "tenemos el peligro de caer en fórmulas que beneficien sólo a un sector".
Una federación feminista
Otros cambios que pretenden impulsar algunos sectores se relacionan con modificar los principios que rigen a la FECh y algunas sus funciones.
La actual presidenta apuesta, por ejemplo, por que la federación se declare feminista. "Es importante refundarla al calor de las movilizaciones feministas de este año y uno de los principios orientadores de la federación debe ser tener un horizonte feminista y ponerse a disposición de todas las compañeras que nos movilizamos durante este año, eso es primordial que la federación lo tenga como principio", afirma la militante de la Izquierda Autónoma (IA).
Mientras que el representante de "Vamos Construyendo" dice que hay que "devolver la federación a los estudiantes, que tenga una ligazón real con los centros de estudiantes, para generar una mayor politización de los espacios de la Universidad de Chile. Nosotros queremos una federación a disposición de las luchas de nuestro pueblo. Es importante cambiar los principios que rigen a la federación y los objetivos que ella persigue".
Entre las modificaciones que también estarían en carpeta de algunos sectores se cuenta reformular la función de los actuales "consejeros FECh"; realizar cambios a la forma en que se maneja el presupuesto de la federación; y hacer ajustes en los procedimientos.
Esto último tiene relación con la forma en que se produjo la salida del anterior presidente. "No había un proceso demasiado claro, se sabía qué hacer, pero había algunas oscuridades que no nos permitían ir tan rápido. Yo creo que es una de las cosas que hay que reformar, dejar mucho más claras las distintas etapas del proceso y las garantías, para que no sea tan trabado como este año, que fue bastante complejo", afirma Juan Carlos Bustos.
Críticas a la baja participación
Si bien hay un alto nivel de consenso en que es necesario reformar los estatutos de la federación, también han surgido algunas críticas a la forma en que se está llevando a cabo el proceso.
Gallegos cuestiona la baja participación estudiantil en el proceso y responsabiliza al Frente Amplio. "El protagonismo lo debían tener los estudiantes de base y no ha sido así. En las discusiones locales se convoca a muy pocos compañeros, facultades de 5 mil personas logran convocar a 20 y eso nos parece algo inaceptable y no vamos a avalar un congreso de federación hecho entre algunos pocos. Mis críticas van hacia aquellos sectores del Frente Amplio que no movieron ni un dedo por convocar realmente a los compañeros de la Universidad de Chile", afirma.
La presidenta de la FECh admite que la participación podría ser mayor, aunque lo atribuye a la extensa movilización que hubo este año. "La idea es que idealmente la participación empiece a aumentar, pero entendemos que después de una movilización tan grande como la que tuvimos este año, existe prioridad en los estudiantes en sacar sus tareas académicas", señala. Pese a ello, asegura que "este congreso ha logrado permear distintas visiones de cómo refundar la federación".
