SANTIAGO.- Un complejo caso de sicariato en la región de Los Ríos quedó al descubierto tras el crimen de un hombre, cuyo cuerpo fue hallado al interior de un taxi colectivo en la ruta que une Pelchuquín con Máfil a fines de noviembre del año pasado.
La indagatoria del caso, llevada adelante por la fiscalía de Los Ríos y la Brigada de Homicidios de la PDI en Valdivia, comenzó con el homicidio de dicho sujeto con un arma de fuego. Tras realizadas las pesquisas, más antecedentes fueron revelados.
"A partir de ese momento se comienzan a efectuar investigaciones, y detectives logran acreditar que
este hecho es un homicidio por encargo que se ejecuta en Valdivia y que es planificado
desde la cárcel de Rancagua", explicó el
comisario Ricardo Cabrini.
Por su parte, el fiscal jefe de Mariquina, Alejandro Ríos, explicó que el hecho "tiene que ver con ajustes de cuentas". Y señaló que "aquí hay, dentro de lo que arroja la investigación hasta el momento, pago de dinero por la ejecución del señor R.O.S., y que tiene que ver con relaciones previas entre imputados".
La víctima, precisaron los investigadores, era un hombre que el reo en cuestión -cumpliendo condena de presidio perpetuo por robo calificado- contrató por $10 millones para asesinar a una mujer.
Esta última era a su vez pareja de un sujeto que el preso de Rancagua conoció en la cárcel de Puerto Montt, y con el cual realizaron estafas telefónicas. De hecho, el dinero involucrado provenía de la comisión de dicho ilícito.
"La persona que está recluida entrega una cantidad importante de dinero a una tercera persona de Valdivia, que es una mujer, para que compre un terreno. Esta persona compra el terreno y pasado el tiempo, más de un año, tendría que entregarlo de vuelta para blanquear el dinero. Pero esta persona no lo entregó y el que está recluido envía a un sujeto para matarla", explicó Cabrini.
"Aquí hay, dentro de lo que arroja la investigación hasta el momento, pago de dinero por la ejecución del señor R.O.S., y que tiene que ver con relaciones previas entre imputados".
Fiscal Alejandro Ríos
Sin embargo, este sicario, quien había salido de la cárcel en marzo de año pasado
tras cumplir condena por homicidio, se arrepintió del cometer el delito tras constatar, según confirmaron fuentes de Emol, que el hijo de la mujer tiene una discapacidad.
Enterado de esta nueva estafa, el preso de Rancagua contrató a otras dos personas, también por el pago de $10 millones, para asesinar al sicario que no cumplió.
Dilucidada la ocurrencia de los hechos, la fiscalía solicitó órdenes de detención que materializó la PDI en las últimas horas. Un hombre, sindicado como autor directo del crimen del sicario, fue detenido en El Tabo, región de Valparaíso; mientras que una mujer, quien le habría entregado las armas para cometer el delito,fue arrestada en la comuna de La Pintana, en la región Metropolitana.
Ambos pasarán a control de detención durante este miércoles.