Durante junio se pudo observar en el cielo un fenómeno lumínico que para nadie pasa desapercibido. Si bien se trata de un efecto absolutamente normal, en los últimas días ha ocurrido con mayor frecuencia, situación que tiene una explicación climatológica y, por supuesto, física. Asimismo, la cordillera también se ha podido observar con mayor claridad durante estos días.
Pero no termina ahí, pues estos espectáculos naturales también podrían tener un factor positivo para las personas, en medio de la cuarentena que rige para muchas comunas del país. Así,
estos atardeceres se han podido apreciar de mejor manera para quienes están en confinamiento, pues muchas veces los traslados del trabajo a la casa no permiten darse un tiempo para ello.
En parte, esto se ha visto reflejado en la gran cantidad de fotografías que se pueden ver en redes sociales, situación que de la que también dan cuenta los profesionales de la salud mental. "Tomando esto en consideración y que cada experiencia es personal y única, el compartir imágenes del fenómeno se convierte en una elección en común donde diferentes personas han encontrado un espacio de contemplación, en contraste a las vivencias asociadas a la pandemia", dice la psicóloga clínica de la Universidad de Valparaíso, Rocío Guzmán.
Por su parte, el meteorólogo de la DGAC, Arnaldo Zúñiga, da cuenta de la explicación desde el plano climatológico. "Es muy probable que este junio, como hemos tenido más nubosidad asociados a los sistemas frontales, cuando la nubosidad es alumbrada al momento de bajar el sol (atardecer), se produce este fenómeno óptico. Mientras más alto es más amarillo, si está más bajo, es más bien rojizo", señala.
Al profundizar la explicación, el experto detalla que "la luz que emite el sol, llamada luz blanca contiene todos los colores del arcoiris. Cuando llegan estos rayos de sol a la atmósfera, chocan con los gases que están ahí presentes, donde mayormente hay nitrógeno, éste gas toma la luz y la difunde, pero es mas amigable o predominante es el color azul, por eso nosotros vemos el cielo azul". En el fondo, lo que vemos, explica, es un fenómeno físico.
Por ejemplo, en verano, este fenómeno se puede observar más frecuentemente en la puesta de sol en el mar, "y la diferencia es que en verano como en el sector interior prácticamente pasa despejado, no vemos ese fenómeno".
En el caso de la cordillera, la claridad que hemos podido notar en estos días dice relación con varios factores. Por un lado, es posible atribuirlo a un efecto de la cuarentena al haber "menos fuentes móviles de contaminación como autos y fábricas. Además, con el paso de los frentes se renueva la masa de aire, y se rompe la inversión térmica que domina Santiago habitualmente y que contribuye al estancamiento del aire".
¿Cuándo se podría dar otro efecto lumínico de cielo rojizo? Zúñiga detalla que se prevé un ingreso de un sistema frontal para el sábado desde Valparaíso al Biobío. Por lo tanto, el domingo, podríamos volver a percibir este fenómeno.
(Vista hacia Plaza de Armas de Santiago, junio 2020. Foto: Aton)
Efectos positivos en la salud mental
Un aspecto que los profesionales de la salud mental valoran es cómo este tipo de efectos naturales pueden incidir positivamente en las personas, especialmente en este contexto de confinamiento.
Karina Vargas Mancilla, psicóloga de RedSalud Pedro de Valdivia destaca que "para entender el efecto de los factores climáticos, incluyendo el atardecer o amanecer en el ámbito psicológico, debemos considerar que la luz, oscuridad y temperatura tienen relación con aspectos fisiológicos que alteran nuestros neurotransmisores, por lo tanto alteran la serotonina, lo cual afecta nuestra emoción. De acuerdo a lo anterior, no es menor que en países nórdicos exista mayor prevalencia de trastorno depresivos por el clima y/o falta de luz".
En este contexto de confinamiento y en ciertas comunas del país con cuarentenas extensas, "se han experimentado cambios psicológicos asociados a ellos que aumentan los factores de estrés, irritabilidad en algunas condiciones, mayor ansiedad y consumo de alcohol, entre otros. Por ello, se mantienen comportamientos constantes de adaptación a este periodo de estrés".
"En particular, el atardecer mantiene factores asociados que internalizan el ciclo natural del día y entrega ciertos aspectos relajantes que podrían influir en disminuir la ansiedad y el estrés en el actual contexto de pandemia. Esto podría tener un efecto positivo en nuestro estado anímico, siempre que esto sea mayormente estable en el tiempo", complementa Vargas.
"La percepción visual de los colores presentes en el cielo durante el atardecer, abarcan en su mayoría los colores cálidos que tienen la tendencia a relacionarse como estimulantes, alegres y hasta excitantes"
Rocío Guzmán, psicóloga clínica UV
Por su parte, la
psicóloga Guzmán complementa que junto con la producción de serotonina, "
la percepción visual de los colores presentes en el cielo durante el atardecer, abarcan en su mayoría los colores cálidos que tienen la tendencia a relacionarse como estimulantes, alegres y hasta excitantes".
Por otro lado, la psicóloga Vargas recuerda la importancia de cuidarse y quedarse en casa. "Aprovechar lo anterior como cambio de rutina es un excelente factor de ayuda, pero considerando que siempre sea observado desde las terrazas y ventanas de los domicilios y que no se vean alteradas las cuarentenas ni el confinamiento que debemos cumplir para protegernos todos del covid-19", destacó.
Revisa algunas imágenes captadas en junio en la RM (Fotos: Aton):
