"La curva europea nos muestra que el reclutamiento de los casos regionales en aumento podría hacer que el descenso (si es que se produce) fuera muy lento y que la mortalidad asociada a covid-19 fuera mayor. También es peligroso que este descenso se detenga, estableciendo un estado de endemia alta similar a lo que está sucediendo en Europa".
Es parte del décimo primer Informe covid-19 elaborado por la Escuela de Salud Pública de la U. de Chile, que advertía el 5 de julio sobre la posibilidad de que el brote de coronavirus en Chile se estabilizara "en algún punto de endemia alta, como se ha observado en Europa".
En el continente, explicaron los académicos que participaron del estudio, se venían registrando alrededor de 18 mil a 20 mil casos diarios luego de superar los grandes peaks de contagios y muertes. El escenario, advierten, es desaconsejable para Chile.
"Se habla de endemia cuando la presencia de una enfermedad es constante en un territorio por un tiempo prolongado con una cantidad de casos similar", explica Andrea Canals, participante del informe y académica de la U. de Chile. "En el fondo, quiere decir que la enfermedad se queda un poco en la población y se mantiene relativamente constante".
En Chile, algunas enfermedades endémicas son la tuberculosis y el chagas, que tienen cantidades estables de contagios todos los años. La influenza y el virus respiratorio sincicial también se consideran endémicos, pero tienen variaciones estacionales y mayor incidencia en invierno.
Una caída "estable"
"Lo que uno esperaría es que si realmente se va a mantener en la población, uno preferiría que no fuese en una cantidad de casos tan alta, como está ocurriendo en Europa, que está llegando a un valor muy estable en el tiempo que todavía es alta", explica Canals.
Aunque asegura que "es difícil decir qué punto de corte es tolerable para el sistema de salud", el objetivo es que sea "una cantidad capaz de soportar por el sistema de salud". "Tiene que ver con la estimación de camas UCI disponibles, por ejemplo", menciona. Según la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva (Sochimi), la ocupación de camas críticas se mantiene en un 82% a nivel nacional.
"Si realmente se va a mantener en la población, uno preferiría que no fuese en una cantidad de casos tan alta, como está ocurriendo en Europa"
Andrea Canals
"Hay que ir observando en el tiempo qué ocurre con eso, pero obviamente uno preferiría que esa cantidad de casos, si se mantiene constante en el tiempo, sea una cantidad no muy alta, que sea abordable por los servicios de salud", añade.
La preocupación surgió debido a que los casos en la Región Metropolitana han bajado ostensiblemente, registrando cifras no vistas en casi dos meses, pero la velocidad de reproducción del virus sigue en ascenso en algunas regiones. Además, dicho indicador "ha disminuido bastante, pero en la última semana se estabilizó un poco". A nivel país, el Re se ubica en un 0,82, lo que quiere decir que cada caso activo contagia a menos de una persona. Sin embargo, en Arica, Los Ríos y Los Lagos está sobre el umbral de 1, y en Aysén por encima de 2.
"Eso muestra un descenso un poco lento, por eso hay que evaluar qué ocurre y esperar que no se mantenga como una endemia alta, sino que siga disminuyendo", concluye.
