"El rol del Estado es resguardar la integridad física y la vida de todas las personas", partió señalando el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, al referirse de la huelga de hambre que siguen más de una decena de privados de libertad en la región de La Araucanía.
Entre estos se encuentra el machi Celestino Córdova, condenado por el crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay, quien anunció el inicio de una huelga seca. En un registro de audio publicado por Radio Biobío, el hombre justificó la decisión indicando que así su "desenlace no será lento como lo esperan los poderes del Estado".
Ante ello, Galli acotó que "en este caso también lo que corresponde es que nosotros como Estado aseguremos la integridad física de quienes están privados de libertad. Por eso mismo se han presentado recursos de protección para que se pueda asegurar la vida y prestar atenciones de salud a quienes están privados de libertad en caso de ser necesario".
Sin embargo, acotó: "Espero que esto no pretenda inhibir o alterar la independencia del Poder Judicial que está conociendo de recursos judiciales por parte de quienes están privados de libertad".
Y cerró: "Y por lo tanto asegurar que el Poder Judicial va a actuar con con total independencia y esa es la voluntad de todos los poderes del Estado. y en el caso del Gobierno asegurar la actuación independiente del Poder Judicial sin presión y sin extorsión".
Hace ya varias semanas que se agravaron las manifestaciones en distintas comunas de la región por la prisión de los comuneros mapuche que iniciaron la huelga de hambre solicitando conmutar su actual privación de libertad por arresto domiciliario total. El caso de Córdova se está debatiendo hoy en la Corte Suprema.
El apoyo a la protesta llevó a la toma de municipalidades, como también a enfrentamientos entre civiles, policías, y daños a los inmuebles de los municipios.
