El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli.
El Mercurio/ Archivo.
De cara al inicio esta tarde de la discusión en particular de la
ley de migración en el Senado, el subsecretario del Interior,
Juan Francisco Galli, insistió este miércoles en que las indicaciones presentadas por la oposición, van en el sentido "contrario" a los objetivos de la normativa.
Desde el oficialismo han rechazado dos indicaciones, la primera es impulsada por los senadores Isabel Allende (PS) y Juan Ignacio Latorre (RD) y busca incorporar la "permanencia transitoria para la búsqueda de oportunidades laborales". Mientras que la segunda, de los senadores Jorge Pizarro (DC), Ricardo Lagos Weber (PPD) y Carlos Montes (PS), establece que los extranjeros que se encuentran en situación irregular o en tramitación, en un plazo de 90 días luego de ser aprobada la ley, puedan solicitar una visa sin recibir sanciones.
"Hemos estado muy atentos al debate que se ha llevado adelante en materia migratoria, en esto especialmente el Presidente Sebastián Piñera ha tenido una postura que ha sido permanente en el tiempo. Piensen ustedes que el proyecto de ley que se está discutiendo hoy en la Sala del Senado. es un proyecto de ley ingresado el año 2013 al Congreso Nacional, ya aprobado por la Cámara de Diputados, que ya tiene siete años de tramitación", sostuvo Galli.
De este modo, el subsecretario recordó que su objetivo es tener "una migración, ordenada, segura y regular". Aludiendo a este último punto, Galli, explicó, que la idea es que "aquella persona que viene a migrar a Chile no tenga que mentir para ingresar a nuestro país, que no tenga que decir que viene como turista cuando la verdad lo que viene hacer es a residir a nuestro país, que cumpla regularmente con las normas establecidas en materia migratoria".
"Ese es el objetivo de nuestro proyecto de ley, creo que es compartido por gran parte de la ciudadanía y en ese sentido, creemos que las indicaciones ingresadas por la oposición en el Senado, van en el sentido contrario de esos objetivos", recalcó.
Y agregó que "lo que han denominado turismo laboral, creo que no permite una migración ordenada, no permite una adecuado control, porque aquella persona que ingresa y llega al aeropuerto y recién ahí declara que viene a residir a nuestro país, hace imposible el control y precariza la situación en que queda esa persona".
"Vamos a exponer nuestros argumentos en el Senado, esperamos que ellos sean convincentes y que los senadores apoyen los argumentos que tenemos", sostuvo, añadiendo que "este tipo de medidas en el largo plazo lo que generan es incentivo a la irregularidad y precarización de aquellas personas que vienen a vivir a nuestro país".
Por su parte, el ministro vocero de Gobierno, Jaime Bellolio, recordó la importancia de la ley de migraciones para ellos, aseverando que "no queremos hacer como el Gobierno anterior que lamentablemente frente a este tema decidió no hacer nada y en cuatro años entregaron más de un millón de personas (...) En estos últimos días se ha visto, a través de los medios que se tiran la pelota de un lado para otro de quién tuvo la responsabilidad, por ejemplo, de poner una visa consular y hasta ahora lo que nos han dicho en la oposición es que ellos no tuvieron la voluntad de hacerlo".
Según el ministro, el "turismo laboral" es una "contradicción en sí misma", esperando de paso que "el Senado rechace estas indicaciones ampliamente estas indicaciones".
