El Juzgado de Garantía de Tomé decretó la prisión preventiva de Mario Jesús Viveros Rivas, imputado como autor de cuatro delitos consumados de sustracción de menores, dos delitos consumados de abuso sexual de menores y poner en peligro la salud pública, ilícitos cometidos el sábado pasado.
En la audiencia de formalización, la magistrada Ximena Martínez Parra ordenó el ingreso de Vivero Rivas al Centro de Cumplimiento Penitenciario Biobío, por considerar que la libertad del imputado constituye un peligro para la seguridad de la sociedad y de las víctimas. Además, fijó en cuatro meses el plazo de investigación.
"Por la gravedad de los ilícitos, tratarse de varios delitos y la posible pena, hizo suponer que la libertad del imputado era peligrosa para la seguridad de la sociedad y de las víctimas, valorando sobre todo la declaración de los niños y de los testigos que procedieron a la detención del imputado", expresó la jueza Martínez.
Según expuso la fiscalía, alrededor de las 14 horas del sábado 17 de octubre de 2020, las víctimas -cuatro niños entre 4 y 8 años de edad- estaban paseando en bicicleta en una plazoleta del sector Alto Tomé de la comuna. Lugar al que llegó el imputado, quien se les acercó y les contó que conocía una cueva que tenía una rampla para bicicletas en un cerro cercano, ofreciéndose a guiarlos hasta el lugar.
Al interior de la caverna, el imputado procedió a abrazar a todas las víctimas y a besar y realizarle tocaciones a dos de los niños.
Viveros Rivas retuvo contra su voluntad a los niños por alrededor de 45 minutos, impidiéndoles que pidieran ayuda, hasta que fue descubierto por familiares de los menores que salieron en su búsqueda, quienes retuvieron al imputado hasta la llegada de Carabineros.
