SANTIAGO.- Desde el ministro hasta jefes de servicio. Al menos ocho autoridades del Ministerio de Salud –y de sus reparticiones a nivel regional y local– han dejado su cargo en los últimos diez meses, durante el tiempo en que la cartera ha estado en el centro de la gestión de la pandemia en el país. Polémicas, diferencias en el manejo de la emergencia y razones personales han estado detrás de la salida de los distintos funcionarios.
Una de las primeras y mediáticas renuncias fue la de la seremi de Salud Metropolitana, Rosa Oyarce, quien a principios de abril dejó el cargo, acusando un trato inmerecido por parte del Minsal. En sus descargos, Oyarce explicó que se le solicitó la renuncia mientras se encontraba cumpliendo cuarentena preventiva. "Durante la cuarentena se me avisó que iban a nombrar una subrogante, y a los dos días, me solicitan que tengo que dejar mi trabajo porque van a nombrar a otra persona", relató.
Sostuvo que le ofrecieron "elegir el cargo que quisiera", pero luego no lo aceptaron. "Yo creo que una persona como yo, que me he sacado la 'mugre' por la gente, no merecía ese trato", sostuvo Oyarce, quien afirmó que la decisión fue "arbitraria".
En su reemplazo, asumió Paula Labra, quien hasta entonces se desempeñaba como coordinadora nacional de la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez (Compin). Su nombramiento fue criticado, en un comienzo, por el hecho de que una ingeniera comercial, y no una profesional de la salud, ejerciera como la nueva autoridad sanitaria de la capital.
Aunque de un perfil más bajo, la nueva seremi Metropolitana también revolvió las aguas cuando, en agosto pasado, trascendió que había presentado su renuncia tras cuatro meses en el cargo y luego que se conocieran algunos problemas relacionados con el manejo de las residencias sanitarias. Sin embargo, gestiones realizadas por la subsecretaria de Salud Pública lograron desactivar su renuncia, por lo que Labra se mantiene hasta ahora en el cargo.
El cambio de ministro en el peak de la emergencia
Sin embargo, el cambio más drástico en el Minsal ocurrió en el mes de junio, con la salida del titular de la cartera, Jaime Mañalich, cuando el país se encaminaba hacia el peak de contagios de la primera ola.
Mañalich dejó la cartera tras recibir una serie de cuestionamientos por la forma en que el Minsal estaba entregando las cifras de los fallecidos por coronavirus, y por algunas frases suyas que generaron revuelo, como cuando habló de "nueva normalidad".
En su lugar, el Presidente Sebastián Piñera nombró al actual ministro, Enrique Paris. Mientras que Mañalich debió enfrentar una acusación constitucional en su contra, la que logró sortear en la Cámara; y una investigación del Ministerio Público, que sigue en curso, ante querellas presentadas por los decesos y la forma de contabilizar las muertes ligadas al coronavirus.
Otra alta autoridad de Salud que dejó su cargo durante la pandemia fue Arturo Zúñiga, quien en noviembre pasado tomó la decisión de abandonar la subsecretaría de Redes Asistenciales. Si bien no se detallaron las razones, no se descarta una eventual candidatura al Parlamento. "Le veo mucho futuro político", comentó el ministro Enrique Paris, al confirmar su dimisión.
La gestión de Zúñiga estuvo marcada por reforzar la red de salud, ante el aumento de la demanda por el covid. Aunque también debió enfrentar el sumario de la Contraloría por el uso de Espacio Riesco como centro médico durante la pandemia. En su reemplazo asumió Alberto Dougnac.
Más recientemente, en el mes de noviembre, Rafael Araos dimitió como jefe del Departamento de Epidemiología del Minsal, entidad encargada de procesar los datos de la pandemia. Durante su gestión se debieron implementar cambios en las metodologías de conteo, llegando a publicarse dos informes epidemiológicos semanales.
Polémicas salidas de seremis
A nivel regional, una de las salidas más polémicas la protagonizó la seremi de Salud de La Araucanía, Katia Guzmán, quien renunció en el mes de julio tras ser cuestionada por participar en distintas actividades públicas estando contagiada de covid-19.
Guzmán fue denunciada ante la justicia por ese hecho y la Fiscalía abrió un proceso en su contra. Tras cumplir su cuarentena, debía retomar sus funciones, pero ello no ocurrió, siendo reemplazada. Finalmente, y aunque fue sobreseída del sumario que se le realizó, concretó su renuncia.
Otra autoridad que dio un paso al costado, en el mes de agosto, fue la seremi de Salud de Magallanes, Mariela Rojas, luego de que el ministro Enrique Paris llamara la atención de las autoridades de la zona ante el aumento de casos y las instara a "coordinarse mejor".
En una carta dirigida al ministro, Rojas lo acusó de faltarle "gravemente el respeto" y emitir "declaraciones para la galería y sin rigor científico".
Más recientemente, a fines de noviembre, también dimitió la seremi de Salud de Los Lagos, Scarlett Molt, quien explicó que la decisión tenía que ver "únicamente por un ámbito personal y familiar". No obstante, su salida se produjo en medio de protestas de gremios del rubro turístico y gastronómico que exigían la renuncia de la autoridad y el término de la cuarentena en la zona.
Durante la emergencia sanitaria también han salido de su cargo algunos jefes de servicio, como el director del Servicio de Salud Chiloé, Germán Echeverría, quien presentó su renuncia en marzo pasado a petición del Minsal; y el director del Servicio de Salud Coquimbo, Claudio Arriagada, quien dimitió en julio aludiendo a razones personales.