Sergio Muñoz, quien fuera general director de la PDI desde 2021, presentó esta tarde la renuncia a su cargo.
Aton
La noche de este viernes, quien fuera general director de la Policía de Investigaciones (PDI),
Sergio Muñoz,
presentó su renuncia a la institución luego de que durante la mañana fuera allanada su casa y su oficina, en el marco del llamado caso Audio.
Después de conocerse las diligencias ordenadas por la Fiscalía Metropolitana Oriente a personal del OS-7 de Carabineros, Muñoz llegó horas más tarde a La Moneda, tras ser citado por autoridades de Gobierno para analizar su situación. En esa instancia, se ratificó su permanencia, a la espera de lo que ocurriera en la formalización del martes.
No obstante, poco después Muñoz volvió al Palacio de Gobierno, donde finalmente se confirmó su salida. Esto, justo después de que el Consejo de Defensa del Estado (CDE) decidiera querellarse en su contra. En esta oportunidad, habló directamente con el Presidente Gabriel Boric. Fue él quien aceptó su renuncia.
En reemplazo de Muñoz, asumirá el prefecto general Claudio González Hofstetter, según informó Presidencia a través de un comunicado.
Previo a la cita, la ministra del Interior, Carolina Tohá, dijo en un punto de prensa que se espera que "esta situación no perjudique el trabajo policial y no perjudique la estrategia de seguridad y en definitiva no termine perjudicando a las personas".
No obstante, el hecho de que a Muñoz se le imputen dos delitos relacionados a revelar secreto en medio de una investigación, sumado a la crisis de seguridad que enfrenta el país, hicieron insostenible su permanencia al mando de la Policía de Investigaciones.
El ahora ex director general asumió en junio de 2021, tras ser nombrado por el ex Presidente de la República, Sebastián Piñera, en reemplazo de su predecesor, Héctor Espinosa, quien afrentaba una polémica investigación por delito de fraude al fisco, uso de gastos reservados y lavado de dinero.
Este contexto resulta relevante para la causa por la que hoy es investigado, puesto que la orden de allanamiento en su contra y la imputación de delitos apunta a que el general director de la PDI habría entregado información relacionada a la causa de su predecesor al abogado Luis Hermosilla.
Lo anterior, porque Hermosilla, hasta antes de abrirse la indagatoria por el caso Audio, defendía a Espinosa en el proceso en su contra. Y los datos sobre la supuesta filtración provendrían del teléfono que le fue incautado a Hermosilla –y que fue periciado por los investigadores- justamente en el caso Audio.