SANTIAGO.- Que el nuevo Ministro de las Ciencias Andrés Couve se ha formado diligentemente desde los laboratorios, nadie lo discute. Es justamente desde allí donde distintos actores de la comunidad han deslizado sus primeras impresiones, en las que no sólo se reconoce el optimismo por llevar un abanderado de la materia al Gobierno, sino también un cierto estado de alerta por sus dichos anteriores.
"Yo dije que era mi único candidato", precisa entre risas la doctora Cecilia Hidalgo. Y es que a fines de mayo de este año, la académica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, quien será la próxima Presidenta de la Academia Chilena de Ciencias, lo había postulado en este medio como su única carta para utilizar el cargo. Seis meses después su idea se concreta.
"Es un hombre con gran visión y ve cómo las ciencias pueden impactar desde los distintos ámbitos de la sociedad, en educación, en salud, en la política, etcétera. Espero que en conjunto con el nuevo ministerio y la subsecretaría Carolina Torrealba, que también es una muy acertada designación, podamos impulsar el desarrollo de la ciencia en Chile", sostiene Hidalgo horas después de la ceremonia que puso en marcha a la cartera.
Quien también esperaba la designación es el decano de la Facultad de Medicina de la UCh, Manuel Kukuljan, que conoció al actual Ministro después de su postdoctorado en 2003. "Teníamos alguna probabilidad mayor que 0 y menor que 100 de que fuese Andrés Couve. Es uno de los nuestros", asegura a Emol desde las instalaciones donde compartían un café matutino, en un principio en el Laboratorio de Neurobiología Celular donde se desempeñaban junto a la académica Jimena Sierralta.
Para él, la visión de la proyección de la ciencia que maneja Couve y su inteligencia dibujarán el plan de trabajo. "Creo que tiene la capacidad, la libertad y el carácter para enfrentarlo. No tiene ningún compromiso político más allá de querer hacer las cosas bien", estima Kukuljan.
Con el Decano concuerda quien acatará el relevo del Instituto Milenio de Neurociencia Biomédica, el biólogo Claudio Hetz. En su opinión, el rol que tuvo su colega para generar este proyecto en la comisión y las "funciones como vocero" en los últimos meses fueron claves. "Todo este proceso generó las confianzas necesarias para que haya sido elegido ministro y yo estoy confiado que él sólo tiene buenas intenciones. No estaba buscando hacer una carrera política, él quiere trascender a través de este legado", dice Hetz.
El primer crítico de Couve
Sin embargo, la proclamación del promotor de la biología celular en Chile no ha quedado exento de críticas al interior de su rubro. Mario Hamuy, el ex Presidente de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), institución que pasará al velo del nuevo Ministerio, sopesó el nombramiento con dichos anteriores de Couve.
"Sabemos que el nuevo ministro Andrés Couve era un detractor de la creación del Ministerio. Por lo tanto, estoy muy preocupado y yo espero que esta implementación no sea sólo simbólica y que no venga con un freno de mano de parte del gobierno", manifiesta a Emol el astrónomo y también académico de la UCh.
Para Hamuy, la cartera que considera fue un "hito positivo para la ciencia" que culminó con "una etapa de modernización de nuestra institucionalidad" ya tiene una primera tarea. "Creo que el nuevo ministro de ciencia, el primero en la historia de Chile, tendría que partir con responder cómo asume un Ministerio con el cual no estuvo de acuerdo y aclarar ese punto para poder disipar dudas".
Quien se suma a estas declaraciones con cautela es la Doctora en Astrofísica de la Universidad de Princeton y Premio Nacional de Ciencias Exactas (1997), María Teresa Ruiz: "Cuando uno mira de afuera es muy fácil criticar. Yo en eso me saco el sombrero por Mario Hamuy, que estuvo en la parte difícil de socializar el tema del Ministerio, de explicarlo 400 veces y donde todos teníamos una idea de cómo hacerlo mejor".
Sin embargo, la también académica de la UCh, felicita a Couve. Dice estar contenta con la designación y asegura que “otra cosa es con guitarra”. “Yo creo que habían varios científicos que tenían susto de que esta estructura del Ministerio pudiera de alguna manera tragarse Conicyt o Fondecyt que hasta aquí, malamente, según mi opinión, ha mantenido la ciencia a flote en el país”, cuenta.
Para el director del Centro de Investigación en Complejidad Social de la UDD, Carlos Rodríguez-Sickert, quien conoció al Ministro de Ciencia en un encuentro organizado por el Congreso Futuro en la Patagonia, la postura crítica que mantuvo Couve fue esencial para la instalación de la cartera. “Su experiencia en la comisión que asesoró al gobierno pasado en la elaboración del proyecto del Ministerio le dio la cuota de escepticismo necesaria para darse cuenta que los cambios nominales — un Ministerio de la Ciencia como un Conicyt maquillado — no basta para enfrentar los desafíos y necesidades de nuestra comunidad científica”, reflexiona el Ph.D. en Economía de la Universidad de Cambridge.