Así lucía Annmarie durante su quimioterapia
mirror.co.uk
Annmarie Bowen (24) tuvo que esperar un año para que le volvieran a crecer sus rulos y demostrar que el cáncer sí se puede vencer. En un inspirador
video de dos minutos, la galesa retrata su proceso de recuperación de un cáncer de mamas que sufrió a los 21 años a través de 150 “selfies”.
A pesar de todo el sufrimiento por la quimioterapia y lo “difícil (que es) mirar hacia atrás y ver cuán enferma estaba y cómo era mi calvicie” en cada fotografía sale sonriendo. Bowen, quien también es estilista, consideraba que el pelo era su mejor atributo.
“Quiero que otras mujeres jóvenes sepan que el cáncer de mamas no sólo afecta a las madres o abuelas. Compartir mi historia también me ha ayudado a llevar a término todo lo que he pasado", dijo la joven al diario británico Daily Mirror.
La muchacha oriunda de Caerphilly fue diagnosticada en abril de 2011 e inmediatamente comenzó con las quimioterapias las cuales la dejaron muy agotada. Se sentía tan débil que no pudo volver a trabajar y decidió que ese tiempo libre que tenía lo dedicaría a descansar. Este “diario” que documentó su batalla contra el cáncer lo comenzó en agosto del mismo año cuando terminó las sesiones.
“Pero la grabación de mi pérdida de cabello y la experiencia con el cáncer fue mi manera de conseguir un poco de control de nuevo. Yo no iba a dejar que arruinara mi vida. Quería construir mi confianza al mostrarle a la gente cómo he llegado tan lejos”, agregó.
A más de un año de su recuperación, Annmarie confesó que aún está trabajando en la construcción de su confianza y que ha sido difícil volver a la normalidad, pero que su novio, Nathan, ha sido increíble y un pilar fundamental en el último tiempo. “Él ha estado ahí para mí durante todo el diagnóstico y el tratamiento también”, dijo.
Grete Brauten-Smith, enfermera especialista en mujeres más jóvenes con cáncer de mamas de la organización “Breast Cancer Care”, dijo que “Annmarie es una de las 31 mujeres de entre 20 y 34 años que son diagnosticadas anualmente con este cáncer en el Reino Unido” y agregó que “a menudo, se sienten muy aisladas”.
Muy contenta y entusiasta se le ve hoy a Annmarie quien antes de volver a trabajar como peluquera, se centra en su recuperación total del cáncer, que hasta ahora está controlado. “Junto con mi cabello perdí mi autoestima, así que el diario fotográfico era muy bueno para construirme a mí misma y mostrarle a la gente cómo estaba progresando”, señaló.