Después de caer, "Victoriano" fue golpeado por los jóvenes que iban en el carro.
Captura de Facebook
SANTIAGO.-
"Triste, dolorido, ultrajado", así describe Andrea Heredia de Olazabal el estado en el que se encontraba un caballo que había llegado hasta su ONG, tras ser rescatado por unos vecinos de Córdoba que vieron al animal desplomarse en la calle, sin fuerzas.
El domingo pasado, "
Victoriano", como lo llama Heredia de Olazabal, tiraba un carro guiado por unos menores, cuando cayó completamente debilitado.
Según relató la propia animalista a Radio Mitre de Córdoba, "los menores empezaron a pegarle para que se parara", pero vecinos del lugar llegaron para defender al animal.
El caballo se encontraba desnutrido y tenía lastimadas sus patas, informó Clarín. La gente le ofreció agua y alimento en espera de que llegara la policía. Y cuando esta se hizo presente, los jóvenes escaparon del lugar.
"Los monstruos de los 'carreros' explotando a este potro muerto de hambre", escribió ese día Heredia de Olazabal, dando aviso a sus seguidores del caso de maltrato.
"El animal fue socorrido inmediatamente por la gente, que evito que le siguieran pegando para obligarlo a levantarse", comentó.
Después de lograr que el animal se parara, "Victoriano" fue trasladado a una comisaría y luego a la Fundación Sin Estribos que dirige Heredia de Olazabal. Allí lo ayudan a recuperarse. "Victoriano, ya está con nosotros. Ahora (está) en un box con viruta, echado y agotado. Mañana veremos sus dolencias", relató la mujer.
Entrevistada por este caso, la animalista señaló que el Estado argentino "tiene que prohibir la tracción a sangre (tracción animal)" y criticó la falta de políticas públicas al respecto.
"La justicia siempre nos termina llamando porque el Poder Judicial no tiene dónde poner a los animales. Y los tratamientos los bancamos con nuestro dinero,
el Estado no nos da un peso", aseguró, y explicó que los recursos con los que cuenta su fundación llegan de donaciones hechas por "gente humilde".
