FR24 News / Captura
El pasado 5 de julio, Gerard Benoit conducía su tractor por su campo en Vimy, al norte de Francia, cuando se percató de que las mazorcas de maíz yacían en el suelo. De inmediato pensó que alguien había dañado su cultivo, pero luego se percató de que se trataba de algo más grande.
El campo había sido utilizado para realizar lo que se conoce como círculos de cultivo, modelos geométricos que aparecen en los campos y que en el caso del de Benoit tenía la apariencia de una cruz templaria.
"Está bien hecho. Nunca habíamos visto un círculo de cultivos antes. Lo vemos en el cine. Es vandalismo, pero nos dijimos: '¡Es bueno por una vez!'", declaró Nicolas Benoit, hijo de Gerard, a FR24 News.
Los Benoit publicaron imágenes de lo ocurrido en su campo en Facebook y los curiosos comenzaron a llegar de inmediato.
"Vimos mucha gente venir al campo y descubrimos que había creencias religiosas a sus alrededor. La gente está loca. Vienen a rezar", afirmó Nicolás Benoit.
"Algunas personas nos dicen que es la cruz templaria, que la energía ha fluido desde la tierra, que nuestro campo está bendito", agregó.
El interés generado por el gigantesco símbolo abrumó a los Benoit, que terminaron borrando las fotos compartidas en la red social, aunque las masivas visitas no se detuvieron.
"Es un horror. No somos un museo. Los círculos de cultivos son hermosos, pero para alguien más", concluyó.