El joven bromista y amante del rock que se convirtió en el primer chileno campeón del Rally Dakar

SANTIAGO.- Ignacio Casale se convirtió en el primer chileno en conquistar el rally más importante del mundo, tras imponerse en la categoría cuadrimotos. Un hito histórico para el deporte nacional.

La vida del santiaguino siempre estuvo ligada a la velocidad. Su amigo Manuel Paredes recuerda que "un día me dijo: 'Compadre, yo me meto a las cuadrimotos para ganar el Dakar'. Me lo dijo con tal convicción que no se me olvidó más".

Su tío Ignacio Casale Silva rememora que "con mi hermano lo llevábamos a las carreras desde que estaba en pañales, sin exagerar, al 'Jeep Fun Race', y él nos veía desde las tribunas con su madre", cuenta su familiar a el diario El Mercurio.

Además, agrega que "es fanático de las motos y las bicis desde los 8 años, pero su primera carrera la hizo conmigo, en el Rally Patagonia-Atacama 2005, donde fue mi navegante. Después de esa competencia, Ignacio cumplió 18 años y se quedó con el jeep con que competimos. Fue su primer auto".   

Por eso años, el tiempo de Ignacio Casale no solo estaba dedicado a las competencias. También tocó guitarra eléctrica -hasta hoy es aficionado al rock-, y le gustaba elevar volantines, andar en skate e ir a pescar. En cuanto a los estudios, probó con la mécanica y la ingeniería, aunque abandonó ambas carreras.

Con la llegada del Dakar a Sudamérica, los ratos para sus hobbies fueron disminuyendo. "Es de convicciones muy claras. Cuando se le mete algo en la cabeza, trata de cumplirlo, con todo. Es muy metódico para trabajar", comenta Paredes, ex manager de Casale.

El joven piloto ha participado en el Rally Dakar desde 2010. Primero lo hizo en camiones, como copiloto de su padre -Franciso Casale-, luego en motos, y las últimas tres veces en cuadrimotos. La tercera fue la vencida. "Veníamos trabajando muy duro para lograr el triunfo. Es un reconocimiento al esfuerzo" dice Andrés Karp, representante del "Perro". "Es súper tranquilo, muy humilde y bueno para la talla", describe Karp.

Por su parte, Carolina Muñoz, jefa de marketing de Mobil, primer auspiciador del chileno, manifiesta que "cuando nos lo presentaron, hace tres años, nos dijeron que tenía potencial. Tiene mucho carisma y es de bajo perfil, eso nos gustó. Apostamos por él y fue un hallazgo".

Su personalidad llamó la atención de la TV. Tras ser segundo en 2013, lo llamaron participar de un reality show. Consultó la decisión con su familia y dijo que no.

Ahora, como campeón, el futuro de Casale está por definirse. Su tío da algunas pistas: "Yo creo que seguirá un año más en cuadrimotos, pero luego él quiere correr el Dakar en autos". Si lo hace, Casale sumará un nuevo hito: ser el primer chileno en competir en todas las categorías de la prueba.