FRANCFORT.- El Banco Central Europeo (BCE) mantendrá sus tasas de interés sin cambios el jueves, en una reunión de su consejo de Gobernadores, aunque un número creciente de analistas espera una reducción en el primer semestre del 2000 de hasta medio punto.
Los 37 economistas interrogados la semana pasada por la AFP y AFX descartaron que el BCE disminuya la tasa de interés rectora de la zona euro, actualmente fijada en 4,75%, pese a que la desaceleración de la economía estadounidense ofrece un argumento de peso a los partidarios de la reducción de los tipos de interés.
El BCE dejó entender que todavía no había llegado la hora de reducir las tasas, pese a las presiones de sindicatos y políticos que le instaron a seguir los pasos de la Reserva Federal estadounidense (FED).
El francés Jean-Claude Trinchet, uno de los principales banqueros centrales de la zona euro, declaró recientemente que el "mantenimiento del crecimiento sin inflación consiste hoy en día en no elevar las tasas ni bajarlas".
"Es normal no dar la misma respuesta en el mismo momento, ya que no nos encontramos, para nada, en la misma situación en las dos orillas del Atlántico", explicó Trinchet.
"La situación en la zona euro y en la Unión Europea (UE) nunca fue tan buena en los últimos años", declararon el ministro alemán de Finanzas, Hans Eichel, y su homólogo francés, Laurent Fabius, en una carta publicada este martes en la prensa.
Ambos afirmaron esperar un crecimiento superior al 3% en Europa.
El directorio del BCE entregó un mensaje con matices el pasado jueves.
"A medio plazo, existen factores de riesgo alcistas que pesan sobre la estabilidad de los precios, que requieren una atenta vigilancia", como la evolución de los sueldos, advirtió el directorio, que teme que una reducción de las tasas provoque un aumento de la inflación.
"En ausencia de riesgos de dislocación de los mercados financieros mundiales, los movimientos de la política monetaria del BCE reflejarán las perspectivas del consumo y de inflación en la zona euro", afirmó Holger Fahrinkrug, analista de UBS Warburg.
"Con las negociaciones salariales en curso, que podrían originar un aumento de los sueldos en la zona euro, el BCE podría mostrarse prudente por cierto tiempo todavía con las tasas de interés, sobre todo si las cifras de la inflación en diciembre y enero son decepcionantes", agregó.
"Teniendo en cuenta la favorable situación coyuntural en Europa, es apropiado mantener la política monetaria", afirmó Ulrich Ramm, jefe economista del Commerzbank.
Esta situación no tendría que durar mucho tiempo, según la encuesta realizada por AFP y AFX. Una gran mayoría de analistas prevé una reducción de las tasas de interés en el primer semestre de este año.
"La zona euro será afectada por la desaceleración estadounidense", al tiempo que la inflación disminuirá sensiblemente, advirtió Stefan Schndeider de Deutsche Bank Research.
"En esta situación, la BCE se animará quizás a bajar en medio punto las tasas en marzo", anunció.