SANTIAGO.- Un crecimiento de 5,5% similar al registrado en el 2000, proyectó para este año, el gerente de Estudios de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), George Lever, quien agregó que éste estaría liderado por el sector no transable (5,6%) debido a una recuperación en el sector construcción (6,3%), servicios y comercio (6%).
Asimismo, dijo que el sector transable experimentaría un crecimiento menor (4%), perdiendo vigor actividades primarias como la pesca, minería y el sector silvoagropecuario.
Lever añadió que el gasto interno experimentaría un repunte con respecto al 2000, previéndose un alza en la inversión y el consumo. Existen proyectos de inversión que debieran materializarse en el 2001 generando un impacto en la economía. Sin embargo, sostuvo que la meta de austeridad fiscal para mantener un superávit del 1% anual, tendería a compensar un fuerte incremento del gasto. Con todo se espera un aumento de un 6,8% de la demanda interna para el 2001.
El economista de la CCS precisó que el sector externo podría verse deteriorado por la desaceleración de Estados Unidos y un menor crecimiento de la economía mundial. No obstante, este deterioro estaría parcialmente compensado por una moderada mejoría en los términos de intercambio (debido fundamentalmente a una caída en el precio del petróleo y a una leve alza en el precio del cobre) y la diversificación de los destinos de exportación de la economía chilena.
Por lo tanto, dijo que se espera una disminución en la balanza comercial, con respecto al 2000, pero manteniendo un saldo positivo superior a los US$ 900 millones, producto de exportaciones por US$ 19.500 millones (con un crecimiento de 7%) e importaciones por US$ 18.590 millones (10%).
Se espera que la inflación disminuya hacia un rango cercano al 3,5%, a consecuencia de la desaparición del factor petróleo. Esta, sin embargo, será en parte compensada por las presiones de costos que han acumulado las actividades de intermediación durante los últimos años.
Lever dijo que se considera altamente probable que el Banco Central asuma una posición más expansiva en su política monetaria durante la primera mitad del año, con el objeto de promover un ambiente de expectativas más propicio con la recuperación económica. Durante este período, la tasa interbancaria podría caer medio punto, el que recuperaría durante el segundo semestre, de la mano de una mejoría en los principales indicadores.
Finalmente, dijo que el desempleo tendería a aliviarse, si bien no alcanzaría los niveles precios a la contracción de 1999. Con un crecimiento esperado de un 1,7% del empleo y de un 1,2% de la fuerza de trabajo, se espera una tasa de desempleo de un 8,8% anual para el 2001.