LA PAZ.- El gobierno de Chile inició hoy gestiones en Bolivia para plantear un transporte bimodal y evitar una eventual disminución del volumen de exportaciones e importaciones por el cierre temporal de la vía férrea al puerto chileno de Arica y ante dificultades de acceso caminero a esa región.
Con este objetivo llegó a La Paz una delegación presidida por el intendente de la Primera Región de Chile, Patricio Zapata, quien se reunirá con empresarios, exportadores, importadores y con autoridades bolivianas.
"Queremos dar tranquilidad y garantizar a la industria y al comercio boliviano", dijo Zapata, al resaltar que se buscará convencer a las autoridades y exportadores bolivianos que "desvíen el volumen de carga transportada por vía férrea a las vías camineras".
El acceso boliviano por tierra y por vías férreas al puerto chileno de Arica fue interrumpido temporalmente desde el 16 de febrero a causa de la crecida del río Lluta, el cual destrozó cuatro puentes y destruyó varios tramos de la vía férrea que llega hasta el puerto chileno.
Tras reponer los puentes destruidos las autoridades chilenas lograron rehabilitar un tramo caminero, aunque unos 21 kilómetros permanecen intransitables. Sin embargo, el intendente chileno dijo que es posible el acceso de cualquier tipo de vehículo de y hacia Arica.
Explicó que en el caso del transporte férreo se estima que la reaparición de vías tardará hasta unos seis meses. El volumen de carga afectada tendría que ser "desviado" a las rutas camineras y este objetivo "forma parte de las conversaciones" que se efectuarán en Bolivia con diversas autoridades, sostuvo Zapata.
El gobierno de Santiago, según la autoridad chilena, prevé invertir unos cuatro millones de dólares para rehabilitar puentes y terraplenes destruidos en la ruta de Arica a Bolivia.