BOGOTA.- El Banco Mundial confía en que Argentina superará los problemas económicos que afronta y que tienen con los nervios de punta a los inversionistas, pero no descarta que enfrente dificultades más serias, dijo el miércoles un economista de la institución.
"Ellos están haciendo un gran esfuerzo y creemos que lo más seguro es que Argentina pueda superar las dificultades", dijo Guillermo Perry, el economista jefe para América Latina del Banco Mundial, al margen de un seminario de perspectivas económicas celebrado en la capital colombiana.
"Desafortunadamente, no podemos descartar totalmente un problema más serio en Argentina", indicó Perry, quien no precisó inmediatamente las dificultades que pueda afrontar Argentina.
La economía argentina no se reactiva y sobre ella se ciernen serias dudas acerca de la capacidad para cumplir el pago de sus deudas.
Perry rehusó comentar a los periodistas si es posible que el país sudamericano cese en el servicio de su deuda.
"Como institución estamos haciendo todo lo posible para colaborarle al gobierno argentino", agregó.
Perry sostuvo que el Banco Mundial no ha percibido síntomas de contagio sobre otras economías como México y Colombia.
No obstante, las principales bolsas de valores de la región y los mercados emergentes se resintieron del mayor riesgo que se percibe sobre Argentina, que superó los 1.300 puntos básicos en el índice EMBI+ del banco J.P. Morgan, cerca al de Ecuador, que ya incumplió con el pago de su deuda.
Argentina arrastra el peso de una deuda de 128.000 millones de dólares, 45 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB).
Los problemas se hicieron más evidentes cuando el martes los inversionistas cobraron elevadas tasas de interés para justificar el riesgo de invertir en un país en el que las disputas políticas entre el gobierno central y las provincias mantienen en vilo su capacidad para cumplir las metas fiscales.
Para este año, Argentina acordó con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que su déficit fiscal no superará los 6.500 millones de dólares ó 2,3 por ciento del PIB, pero cifras a mayo mostraron que el margen se estaba reduciendo peligrosamente.