GINEBRA.- Los negociadores de la Organización Mundial de Comercio acordaron formalmente el lunes los términos de la entrada de China en el grupo, diciendo que era una muy necesaria señal de confianza y estabilidad de un sistema comercial vapuleado por el terrorismo y el temor a la recesión.
Concluyendo con un período de 15 años de arduas negociaciones, el negociador chino Long Yongtu dijo que el acceso de su país al grupo que domina el comercio mundial será una situación "sin perdedores" que desataría el enorme poder de compra de 1.200 millones de chinos y conduciría a un vasto mercado.
El representante comercial de Estados Unidos, Robert B. Zoellick, también elogió el anuncio.
"La decisión de hoy... reforzará la economía global", dijo en una declaración emitida en Washington.
"China ha hecho un firme compromiso con el resto del mundo a abrir sus mercados y adherir a las normas internacionales, lo que ayudará a los obreros, consumidores, agricultores y exportadores norteamericanos", añadió.
El acuerdo fue concertado en las primeras horas del sábado en una reunión "informal" del organismo de 142 naciones, y refrendado el lunes en una sesión formal del comité de trabajo sobre China, en la sede de la OMC.
Debe ser aprobado en una reunión de ministros de comercio programada para noviembre en Qatar. El director general de la OMC, Mike Moore, insistió en conferencia de prensa que la organización continuaba preparando la sesión a pesar de los temores a los posibles disturbios de los grupos contrarios a la globalización. Luego, la legislatura china tendría que aprobar el texto de 1.000 páginas para que el país entrara en la organización a principios del año próximo.
China, una vez que sea miembro plenario, tendrá que respetar las normas internacionales de comercio. Tendrá que abrir a la competencia exterior sus sectores protegidos, como el de la agricultura, y reducir su frondosa reglamentación burocrática. A cambio de esto, tendrá mas oportunidades que nunca de entrar en los mercados extranjeros.
