WASHINGTON.- El estado de Connecticut descartó el martes firmar un acuerdo antimonopolio con Microsoft Corp., el gobierno federal de Estados Unidos y nueve de los 18 estados que forman parte del histórico juicio.
El procurador general de Connecticut, Richard Blumenthal, declaró que el acuerdo anunciado a principios de este mes, el cual aún debe ser aprobado por un juez federal, tenía demasiadas falencias y ambigüedades como para firmarlo bajo el actual formato.
"El acuerdo refleja un buen progreso pero no es suficiente", dijo Blumenthal en un comunicado en el que anunció su decisión de continuar con el juicio del Estado contra el gigante del software.
Tras la audiencia del 6 de noviembre, Connecticut había sido vital para que el pacto resolviera el caso que ya lleva tres años, pero no descartó la posibilidad de que no firmaría.
Un tribunal federal de apelaciones determinó que Microsoft había mantenido ilegalmente el monopolio en sus sistemas operativos de computadoras personales.
El acuerdo propuesto está diseñado para darle a los fabricantes de computadores la libertad de crear otro software y exige que Microsoft comparta las partes del funcionamiento interno del sistema operativo de Windows con otros fabricantes.
Durante el plazo de cinco años del acuerdo, un panel de tres miembros ayudaría a asegurar que se cumple con lo pactado.
Sin embargo, Blumenthal dijo que pensaba que era necesario un período más prolongado, junto con un mecanismo de control más estricto y disposiciones más rígidas para que Microsoft no tome represalias contra sus rivales.
"Soy optimista acerca de que podemos continuar negociando con Microsoft y mejorar el acuerdo o llegar a un resultado judicial que asegure que se restablece la competencia y el beneficio de los consumidores", dijo.
La jueza de distrito, Colleen Kollar-Kotelly, dijo que realizará audiencias a principios del año próximo para determinar si el acuerdo beneficia al interés público, mientras que los nueve estados que continúan oponiéndose al pacto se preparan para audiencias que determinen si es adecuado aplicar sanciones adicionales contra Microsoft.