SANTIAGO.- El ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, dijo hoy que el volumen de la deuda pública argentina era "impagable" y por ello, sincerar la economía y declarar la moratoria era el camino adecuado para alcanzar una posterior recuperación con un incremento de la recaudación tributaria y la estimulación del crecimiento.
El secretario de Estado señaló que para el país los efectos serán más locales que globales, "ya que tenemos un presupuesto proactivo para el 2002 aprobado por el Congreso y, por tanto, no veo apreturas para el presupuesto fiscal".
Agregó que también van a influir los acuerdos comerciales que el país puede suscribir con Estados Unidos y la Unión Europea en el plano privado, la agenda pro crecimiento acordada por la Sofofa, "cuyas conversaciones siguen viento en popa".
Sin embargo, el ministro de Hacienda admitió que los efectos locales afectarán al turismo nacional por la merma de turistas argentinos y de igual modo caerán las exportaciones a la vecina república, que alcanzan a un 4,0 por ciento del comercio total".
Eyzaguirre expresó su solidaridad con Argentina y dijo que ya estamos apoyando las medidas adoptadas por las nuevas autoridades trasandinas a través de nuestros aportes en el Fondo Monetario Internacional, donde Chile es acreedor para que los recursos de los organismos internacionales puedan llegar al pueblo argentino, lo que no ocurría en esta crisis porque los acreedores se apoderaban de estos créditos cobrando intereses arbitrarios.
El ministro dijo que el contagio de la crisis argentina es menor, ya que su deuda pública sólo alcanza al tres por ciento del PIB, con una cifra de 5.000 millones de dólares, lo que no ocurrió en Argentina, donde los recursos de privatizaciones de destinaron a gastos corrientes y el país gastó más que sus ingresos.
Eyzaguirre expresó además su confianza en que la economía argentina recupere sus niveles de crecimiento a través de un programa de recuperación económica que se base en la credibilidad y la confianza de los inversionistas.