BERLÍN.- El canciller alemán, Gerhard Schroeder, cree que la puesta en circulación del euro conducirá a la larga a una bajada de los precios, debido a que la posibilidad de hacer una comparación directa entre los diversos países aumentará la competitividad.
En un artículo para el dominical "Bild am Sonntag", el canciller apela a los alemanes a confiar en la nueva moneda que, asegura, no será más débil que el marco alemán.
Schroeder subraya que nadie debe temer a una subida de precios encubierta y como ejemplo de que esto no ocurrirá pone a su propio gobierno.
"El gobierno ha redondeado a la baja el cambio al euro, de forma que los ciudadanos se ahorrarán 400 millones de marcos (unos 200 millones de euros) en impuestos y gravámenes".
La moneda única reúne un espacio económico con más de 300 millones de "personas capaces y creativas", escribe el canciller, quien, sin embargo, apela a los alemanes a aprovechar la "energía del euro".
"También nosotros los alemanes tenemos que saber imponernos ante la creciente competencia, pero, a cambio, se nos abre un nuevo mundo con muchas más oportunidades", añade.
Según encuestas europeas, los alemanes son junto a los finlandeses los ciudadanos más reacios a aceptar la nueva moneda que en este país rechaza todavía más de un cincuenta por ciento.