BUENOS AIRES.- La Cámara de Diputados de Argentina aprobó hoy el proyecto de Presupuesto 2002, que prevé una bajada del 4,9 por ciento en el Producto Interior Bruto (PIB) y una fuerte reducción del déficit fiscal.
El proyecto, que pasará al Senado para su revisión, fue aprobado esta mañana con el respaldo del gobernante Partido Justicialista (PJ-peronista) y de la Unión Cívica Radical (UCR), la mayor fuerza de la oposición.
En cambio, votaron en contra los partidos provinciales, Alternativa por una República de Iguales (ARI) y las fuerzas políticas de izquierda.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) puso como condición previa a cualquier análisis sobre una ayuda financiera para Argentina la aprobación de un presupuesto "austero" que sirva de base al programa económico "sustentable" que exigen los organismos internacionales de crédito.
Otra exigencia del Fondo era un acuerdo entre el Estado y las provincias para cambiar el esquema de reparto de los recursos federales, algo que el Gobierno del Presidente Eduardo Duhalde logró el miércoles tras largas y complejas negociaciones.
El Presupuesto enviado por el Gobierno incluye un cálculo de gastos para el ejercicio de 42.844.471.934 pesos (unos 21.000 millones de dólares, 24.200 millones de euros) y prevé un inflación del 15 por ciento.
El déficit de las cuentas públicas no podrá superar los 2.949 millones de pesos (unos 1.470 millones de dólares) y el Estado tendrá una autorización para emitir hasta 3.500 millones de pesos (unos 1.750 millones de dólares).
Además, el presupuesto mantiene la reducción salarial del 13 por ciento que se aplica desde el año pasado en los salarios de los empleados del Estado y las prestaciones de los jubilados, un punto que generó protestas callejeras y manifestaciones populares frente a la sede del Parlamento.
La norma legal fue aprobada en su versión general por la Cámara de Diputados luego de más de once horas de debate, tras lo cual los legisladores analizaron durante esta madrugada el proyecto artículo por artículo.
El jefe del bloque radical, Horacio Pernasetti, dijo que su grupo de diputados avaló el presupuesto para ayudar a un Gobierno que "asumió en medio de una fuerte crisis" y necesita una "herramienta vital" para las negociaciones abiertas con la esperanza de obtener asistencia financiera desde el exterior.
En cambio, las fuerzas de izquierda y el ARI consideran que el programa no se ajusta a la realidad, y que no se cumplirán esos cálculos de inflación después de que la moneda argentina perdió más de la mitad de su valor frente al dólar en apenas dos meses.
Tampoco confían en los cálculos del Gobierno con relación a los niveles de recaudación fiscal, una variable económica en baja permanente a causa de la recesión.
Al comenzar la sesión, el peronista Jorge Matzkin, presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, reconoció que Argentina en el 2002 "va a ser en su conjunto un 5 por ciento mas pobre que el año pasado", lo cual "sirve para tener una clara dimensión de la profundidad de la crisis".
En diciembre pasado, Argentina fue escenario de un estallido social que causó la muerte a 28 personas y forzó a renunciar a dos presidentes en apenas diez días (Fernando de la Rúa y Adolfo Rodríguez Saá), tras lo cual Eduardo Duhalde llegó al poder el primero de enero por designación de la Asamblea Legislativa.