SANTIAGO.- El gobierno chileno colocará este año un nuevo bono soberano, aprovechando la favorable coyuntura internacional, ya que el "spread" ha caído a menos de la mitad desde octubre del año pasado (de 256 a 116 puntos base).
La emisión bordearía los US$ 1.200 millones.
"Yo pedí permiso al Congreso hasta por US$ 1.200 millones y probablemente voy a usar ese espacio", dijo anoche el ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, a TVN.
Se trataría de la segunda parte de un bono emitido en octubre de 2001, a 10 años, cuyo registro ante la SEC alcanzó los US$ 2.000 millones.
Sobre esa decisión, el titular de Hacienda explicó que a Chile le conviene "como sector público tomar deudas en dólares, porque cuando baja el dólar, cae un poco la rentabilidad de nuestros activos, pero se nos hacen más baratos nuestros préstamos".
Ejemplificó que "dado que a nosotros nos prestan a 100 puntos base sobre los Bonos del Tesoro (de EE.UU.) y a otros países les prestan a 700 puntos, significa que nos cobran 6% menos de tasa de interés que al resto".
Eyzaguirre atribuyó este bajo riesgo-país de Chile a la responsabilidad de la política fiscal.
En este contexto, rechazó la posibilidad de que una eventual rebaja de impuesto para las empresas se realice sin que se cumpla un requisito clave: que sea compensada, es decir, que los recursos que el estado dejaría de recibir por ese concepto sean restituidos por medio de otra vía.
La Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) ha instado al gobierno a que una iniciativa en tal sentido no necesariamente deba cumplir con ese exigencia.
"La deuda externa de Chile privada son US$ 35.000 millones; seis puntos (de diferencia) por US$ 35.000 millones, estamos hablando de casi US$ 2.000 millones anuales que se ahorra el sector privado gracias a la responsabilidad fiscal. ¿Queremos arruinar eso?, Se da cuenta lo que son US$ 2.000 millones versus lo que podría ser una rebaja de impuestos. No matemos la gallina de los huevos de oro", enfatizó.
Salario mínimo
En otro ámbito, Eyzaguirre calificó como "imposible" elevar el sueldo mínimo a $ 138.000, desde los $ 105.500 actualmente vigentes como lo solicita la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
"Si usted pone un salario mínimo de $ 138.000 y realmente la productividad de un trabajador no calificado es de $ 100.000 ó de $ 105.000, no lo van a contratar, entonces lo que vamos a tener es desempleo", subrayó.
El ministro de Hacienda agregó que el Estado está reorganizando su gasto social para elevar los subsidios a las familias más pobres y así ayudarlas a vivir con el sueldo mínimo.