WASHINGTON.- El Fondo Monetario Internacional (FMI) corrigió sus cálculos, por segunda vez en cuatro meses, e indicó hoy que la economía de América Latina crecerá este año apenas un 0,7 por ciento.
En octubre, la institución multilateral había calculado que el crecimiento de Latinoamérica sería del 1,9 por ciento y en diciembre calculó que sería del 1,7 por ciento.
En 2000 el Producto Interior Bruto (PIB) de la región latinoamericana y caribeña creció un 4 por ciento y en 2001 en un 0,7 por ciento, según señala el FMI en su informe "Perspectivas Económicas Mundiales", divulgado hoy en Washington.
El documento, con el cual el FMI preludia cada seis meses los encuentros de cientos de ministros de finanzas y banqueros en su reunión conjunta con el Banco Mundial (BM), señaló que este año la situación financiera de Argentina es el lastre principal en la economía regional.
Para Argentina, el FMI calculó que el PIB caerá este año entre un 10 y un 15 por ciento, y que en 2003 tendrá un crecimiento nulo o éste sufrirá un descenso del 3 por ciento.
El informe aclaró que las perspectivas de Argentina se presentan con márgenes tan amplios "debido al alto grado de incertidumbre", y que "para el agregado regional se usa el punto medio".
Kenneth Rogoff, economista jefe del FMI, señaló hoy en la presentación del informe que la situación económica de Argentina es "muy grave" y está dominada por un alto grado de incertidumbre, aunque "no hemos visto un alto grado de contagio" en el resto de las naciones de la región.
Según Rogoff, la ausencia del contagio se debe a que la crisis de Argentina había sido prevista con mucha antelación, a que los flujos a los mercados emergentes han sido bajos durante largo tiempo y a que la relación comercial de esa nación con el resto del mundo es "bastante baja".
El grupo de países de Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), que el año pasado tuvo un crecimiento del 0,2 por ciento, tendrá este año una contracción del 0,9 y puede esperar un crecimiento del 3 por ciento en 2003, según el Fondo Monetario.
El crecimiento de Brasil el que actúa como contrapeso a la crisis argentina y el FMI calcula que, después de un aumento del PIB brasileño del 1,5 por ciento en 2001, este año gozará de un crecimiento del 2,5 por ciento.
La región andina tiene un panorama mejor, según el Fondo, y después de un crecimiento del 2,2 por ciento en 2001, terminará este año con un aumento del PIB de un 2,1 por ciento y se encamina a uno del 4 por ciento en 2003.
Para este año, el PIB de Chile crecerá un 3 por ciento, el de Ecuador un 3,1 por ciento, el de Perú un 3,7 por ciento y el de Colombia un 2,5 por ciento, mientras que el de Venezuela se contraerá en un 0,8 por ciento, según las perspectivas del Fondo.
México, que según el FMI en 2001 tuvo una caída del 0,3 por ciento en su PIB, tendrá este año un crecimiento del 1,7 por ciento, y en 2003 del 4,9 por ciento.
La institución que consultan los gobiernos latinoamericanos y caribeños para sus prioridades presupuestarias indicó hoy en su informe que "siempre hay riesgos e incertidumbres sustanciales".
"La atención económica reciente en América Latina se ha centrado en la crisis en Argentina", señala el informe, de 238 páginas, que indica que ese país afronta "un ajuste extremadamente difícil".
Uno de los riesgos es que provoque contagios más amplios, ya que por ahora, según el Fondo, sólo ha afectado seriamente a Uruguay.
"El riesgo del contagio no puede nunca descartarse", avisó hoy Rogoff en la presentación del informe.
"Las perspectivas para América Latina como un todo seguirán fuertemente influidas por los acontecimientos económicos en los países avanzados, ya sea mediante los vínculos comerciales como por los flujos financieros que necesita la región para atender sus altos requerimientos de financiación", señaló el FMI.
Otras zonas
"La mayoría de los indicadores sugieren que la recuperación está en marcha", llevada sobre todo por un repunte en la actividad económica de Estados Unidos que ha superado las expectativas.
El organismo multilateral calcula que el Producto Interior Bruto (PIB) mundial crecerá este año un 2,8 por ciento, cuatro décimas más que lo pronosticado en diciembre, y que en 2003 llegará al 4 por ciento.
La otra única región para la que ha rebajado considerablemente sus previsiones es para la formada por Medio Oriente y Turquía, en siete décimas -desde el cálculo de crecimiento para 2002 del 4 por ciento que hizo en diciembre, al actual 3,3 por ciento-, debido a la inestabilidad política en la zona.
En la presentación del informe, Rogoff, señaló hoy que "la economía mundial disfrutará de una recuperación en 2002", dentro de un proceso liderado por EE.UU..
Rogoff apuntó que, sin embargo, existen algunos riesgos, entre los que destacó el fuerte déficit por cuenta corriente de EE.UU., algo a lo que el Gobierno de ese país apenas concede importancia.
"La desaceleración mundial ha tocado fondo, especialmente en Estados Unidos y, en menor extensión, en Europa y en algunos países de Asia", apunta el FMI, que destaca que persisten "serias preocupaciones" sobre la situación de Argentina y de Japón.
El Fondo Monetario señala además que, excepto Japón, hay "poco margen" para más reducciones en los tipos de interés y que ahora la política monetaria de las principales áreas deberá centrarse en "revertir" anteriores recortes de intereses.
Por regiones, la revisión que ha realizado el FMI para Estados Unidos es la más llamativa.
Ahora prevé que crecerá un 2,3 por ciento este año, 1,6 puntos más de lo calculado hace cuatro meses, cuando un escaso pronóstico de crecimiento del 0,7 por ciento provocó roces con el Departamento del Tesoro.
En 2003, calcula que el PIB de EE.UU. aumentará un 3,4 por ciento.
"Los sucesos del 11 de septiembre tuvieron un corto impacto en la actividad pero, en contraste con los temores que algunos expresaron, no han impedido una recuperación en la primera mitad de 2002", dijo el organismo multilateral con sede en Washington.
Para la zona europea, el FMI también ha incrementado su previsión de crecimiento para 2002, concretamente en dos décimas.
En su informe, el Fondo Monetario prevé que el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de la eurozona será este año del 1,4 por ciento y que en 2003 repuntará hasta el 2,9 por ciento.
En cuanto a España, el FMI también revisó al alza su cálculo de crecimiento para este año, que sitúa ahora en el 2,3 por ciento -dos décimas más-, y espera que en 2003 alcance el 3,2 por ciento.