SANTIAGO.- El ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, ajustó hoy sus proyecciones de crecimiento para la economía chilena que, a su juicio, se expandirá entre 2,5-3,0% durante este año.
Si bien el secretario de Estado aseguró que los próximos trimestres mostrarán una recuperación en el ritmo de alza del PIB, reconoció que "la velocidad a la que lo vamos a hacer, difícilmente podrá llevar a la economía a una tasa superior al 3,0% en 2002. Lo más probable es que se ubique por debajo de esa cifra, probablemente en un rango entre 2,5% y 3,0%".
Rebaja de tasa
El ministro respaldó plenamente la decisión del Banco Central de recortar la tasa de interés de política monetaria desde 4,0% a 3,25% y descartó que la medida haya sido tomada por razones políticas.
Afirmó que la histórica rebaja de la tasa apunta en la línea correcta de "dar confianza" para que los chilenos consuman e inviertan en este país.
"Es una señal reactivadora de confianza para nosotros mismos. Con tasas de interés bajas, la gente sigue apostando por mantener el peso chileno y por dejar sus ahorros en nuestro país", declaró el ministro.
El mercado económico reaccionó también con entusiasmo con alza en las acciones, por vez primera en las últimas semanas en la Bolsa de Valores, y una baja de diez pesos en el dólar que se cotiza ahora en torno a 690 pesos la unidad.
Según el ministro Eyzaguirre, la quinta baja consecutiva de tasa de interés decretada el jueves por el Banco Central "es una señal de la tremenda confianza que nos tenemos a nosotros".
"Significa que la gente puede dejar de temer respecto al futuro y hacer sus trámites de consumo e inversión con tranquilidad", subrayó.
Eyzaguirre insistió en que la rebaja de la tasa de interés no va solucionar automáticamente la incertidumbre por las turbulencias mundiales y el desempleo en Chile, pero es una medida que va en la dirección correcta de reactivar el consumo de los chilenos.
El ministro reiteró su oposición a reactivar la economía por la vía de un mayor gasto fiscal "que podría traer complicaciones".
"Lo que está detrás de la cautela de los inversionistas es un conjunto de factores en que lo más notable es la incertidumbre que hay en la economía mundial en general y el problema del desempleo no se soluciona automáticamente con una baja de intereses", subrayó.
