SANTIAGO.- Las ventas minoristas cayeron un 1,6 por ciento durante el pasado julio en comparación con igual período del año anterior, el peor resultado del sector desde febrero de 2001, informaron hoy los empresarios.
"Esto no hace más que confirmar lo deprimido que se encuentra el consumo, así como la actitud cautelosa de la población frente al gasto, que se sustenta en la percepción de que la situación no mejorará en el corto plazo", afirmó Fernando Lihn, presidente de la Cámara Nacional de Comercio y Turismo (CNC).
La caída del séptimo mes del año significó que las ventas minoristas en los siete primeros meses de 2002 acumularan una leve alza del 0,6 por ciento en comparación con el mismo período de 2001, precisó el directivo.
La contracción de julio se debió a las bajas registradas en el sector línea hogar (-13,7 por ciento), muebles (-9,3 por ciento), artefactos eléctricos (-6,9 por ciento) y supermercados (-4,7 por ciento).
Lihn se declaró preocupado porque el panorama para el comercio no es muy alentador, debido a la persistente desaceleración que han registrado las ventas durante este año, y considerando que hay una mayor base de comparación con los meses venideros que hace difícil que las cifras repunten.
A lo anterior se agrega el aumento del desempleo, que alcanzó su punto máximo en el tercer trimestre (9,5 por ciento) y el debilitamiento de las perspectivas para el segundo semestre por el menor crecimiento mundial, especialmente de Estados Unidos.
El directivo sostuvo que las sucesivas rebajas de tasas de interés anunciadas por el Banco Central, uno de los instrumentos que utiliza el instituto emisor para mantener la inflación controlada, no han alterado en lo más mínimo el comportamiento de la gente, y recalcó que la demanda interna sigue comprimida.
En lo que va de año, el instituto emisor ha rebajado en seis ocasiones la tasa de interés, desde el 6,5 por ciento anual, el pasado 10 de enero, hasta el 3 por ciento, el pasado 8 de agosto, para estimular la demanda interna, sin los resultados esperados.
De acuerdo a los magros resultados de julio, la CNC redujo su proyección de crecimiento de las ventas para este año a un rango de entre 1 y 1,5 por ciento -anteriormente las había situado entre 1,5 y 2 por ciento-, siempre que la demanda se reactive hacia el término del año.
A juicio del dirigente, la economía del país tampoco mostrará cambios significativos en la segunda mitad del año, y consideró que el Producto Interno Bruto (PIB), crecerá un 2 por ciento en lugar del 2,5 por ciento que el sector estimaba anteriormente.