NUEVA YORK.- El "efecto Venezuela", la reducción de las exportaciones de crudo de la nación sudamericana como resultado de una huelga de trabajadores petroleros, está comenzando a hacerse sentir en Estados Unidos, dijo el Instituto de Petróleo de Estados Unidos (API) de la costa del golfo de México, donde la mayor parte del petróleo venezolano es refinado, se redujo en 1,84 millones de barriles.
Thomas P. Bentz, analista de recursos energéticos de BNP Paribas, una empresa que negocia con valores futuros de materias primas, dijo al diario "The New York Times" que las consecuencias de la huelga petrolera en Venezuela empiezan a sentirse en los Estados Unidos.
"Creí que comenzaríamos a registrar el impacto esta semana", dijo Bentz, "pero a veces esas cosas demoran un poco más. Tal vez haya un intervalo. Podría ser que todavía no estamos sintiendo el efecto pleno".
El precio del petróleo para las entregas de febrero subió el martes 22 centavos de dólar, y cerró a 31,97 dólares en la Bolsa Mercantil de Nueva York. Durante las transacciones, el barril de crudo llegó a superar los 32 dólares por barril, su nivel más alto en 22 meses.
John P. Kilduff, ejecutivo de Fimat USA, unidad de Societe Generale, dijo que excepto en la costa Oeste de Estados Unidos, en el resto del país ha disminuido la disponibilidad de crudo.
Si se deja de lado a la costa oeste, donde se han acrecentado las existencias de petróleo, debido a desvíos de cargamentos destinados originalmente al Asia, "hay una disminución de 1,3 millones de barriles en su conjunto", dijo Kilduff a "The New York Times".
Otra de las consecuencias del "efecto Venezuela" ha sido una disminución de la actividad en algunas refinerías.
Kilduff dijo que en esta época del año, pleno invierno, las refinerías procesan más de un 93% de su capacidad, especialmente petróleo destinado a la calefacción. Sin embargo, en la última semana, la capacidad de refinación se redujo a 88,7%.
"Ese descenso en la utilizacion de la capacidad de refinación", dijo Kilduff, quien agregó que "refleja lo que las refinerías consideran un problema con el abastecimiento de crudo".
También las refinerías en la costa del golfo de México han disminuido su producción. El representante Billy Tauzin, presidente del comité de Energía de la cámara baja, envió el viernes pasado una carta al secretario de Energía, Spencer Abraham, pidiéndole usar recursos de la reserva estratégica de petróleo debido a los problemas que confronta Venezuela para exportar su producto.
En su carta Tauzin dijo que dos grandes refinerías, que representan "aproximadamente un 10% del mercado de productos refinados se quedarán sin crudo para fines de mes". Tauzin se negó a identificar las refinerías, pero analistas dijeron a "The New York Times" que se trata de dos grandes plantas en Luisiana y Texas propiedad de Citgo, subsidiaria de Petróleos de Venezuela.