LIMA.- El Gobierno de Perú manifestó al de Chile su preocupación por su intervención en respaldo de la empresa Lucchetti, que por decisión municipal debe dejar de operar en una reserva ecológica de Lima, y llamó a evitar que las relaciones entre Estados se vean afectadas.
En un comunicado de nueve puntos difundido anoche, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú señaló que el Gobierno está preocupado porque su homólogo chileno "haya emitido opinión sobre el fondo de una controversia entre una empresa" y el ayuntamiento limeño.
Le preocupa a Perú "más aún", el hecho de que el Gobierno de Chile "haya afirmado que acompañará la decisión de la empresa de recurrir al Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), cuando no le corresponde ser parte en dicha acción".
El Gobierno peruano, según la nota, le ha hecho saber al de Chile que mantiene un "estricto respeto" por la autonomía política, económica y administrativa de las municipalidades, establecida en la Constitución de este país.
Añadió que, en ese sentido, ha sostenido la invariable postura de ajustarse a los procedimientos previstos para casos de este tipo, "lo que guarda total coherencia con la necesidad de evitar interferencias políticas en una controversia que debe ser resuelta en el ámbito de la jurisdicción aplicable, y así evitar que las relaciones entre ambos Estados se vean afectadas".
El comunicado recalcó también que el Gobierno peruano respeta y cumple plenamente "de manera escrupulosa" las disposiciones de la ley y sus compromisos internacionales, para asegurar la vigencia del estado de derecho y la estabilidad jurídica.
Agregó que este respeto y cumplimiento de las leyes y compromisos "lo pueden atestiguar las numerosas empresas de origen chileno que operan con toda normalidad en el Perú".
En otro de los puntos, la nota precisó que se ha señalado al Gobierno de Chile el rechazo "a la imputación de que la empresa Lucchetti Perú S.A. habría sido objeto de un trato discriminatorio con el consentimiento del Gobierno peruano".
Reiteró igualmente lo expresado en diversas ocasiones por el ministro peruano de Relaciones Exteriores, Allan Wagner, de que no es aplicable a la controversia entre el Ayuntamiento de Lima y la empresa chilena, el Convenio para la Promoción y Protección Recíproca de Inversiones suscrito por Perú y Chile y que entró en vigor el 3 de agosto del 2001.
Explicó que el problema de la Municipalidad y la compañía de fideos y pastas se inició en enero de 1998 cuando el ayuntamiento declaró nulo el otorgamiento de licencia para que Lucchetti construyese su fábrica en la reserva limeña los Pantanos de Villa, por considerar que dañaría el equilibrio ecológico de la zona.
No obstante, la empresa chilena ha presentado el caso ante el CIADI, y el comunicado peruano señaló que el Gobierno ha sido notificado al respecto.
Añadió que la solicitud de arbitraje presentada por Lucchetti, "será estudiada y contestada oportunamente, acorde con los plazos contemplados en los estatutos del mencionado Centro".
El Gobierno de Perú "adoptará todas las medidas diplomáticas y jurídicas que sean necesarias para salvaguardar el cumplimiento de la ley peruana y sus reglamentos en las instancias internacionales pertinentes", concluye el comunicado.
El 16 de diciembre, la Municipalidad de Lima, que ha acusado a la empresa chilena de construir su planta industrial sin cumplir con las leyes del país, rechazó una solicitud de ésta para mantenerse en los Pantanos de Villa hasta marzo próximo, y decidió que la fábrica se clausure antes de finales del 2002.