TOKIO.- Japón considera la posibilidad de aplicar presión económica y diplomática sobre Corea del Norte, con medidas como la restricción de las exportaciones y del comercio, para complementar la estrategia estadounidense frente a la política nuclear de Pyongyang, dijeron este martes algunos medios.
Estas medidas podrían tener un serio impacto sobre Corea del Norte, un país con escasez de fondos, ya que Japón es un socio comercial significativo, y Corea del Norte siempre se ha beneficiado de las contribuciones de los coreanos a favor de Pyongyang que viven en Japón.
Los funcionarios estadounidenses están impulsando una estrategia que denominan "contención a medida", una mezcla de presión diplomática y económica sobre Corea del Norte, que igualmente ya es uno de los países más aislados del mundo.
Fuentes del gobierno japonés dijeron que Tokio considera una cantidad de medidas posibles para complementar la estrategia de Estados Unidos, como detener el comercio y restringir las exportaciones, dijo el diario Yomiuri Shimbun.
Japón también podría revisar los planes para proveer reactores nucleares de agua liviana a Corea del Norte bajo el marco acordado por la Organización para el Desarrollo Energético en la Península Coreana, dijo el periódico, que citó a fuentes del gobierno.
Por su parte, la Agencia de Defensa japonesa podría desplazar dos destructores equipados con sistemas de defensa área Aegis, de tecnología de avanzada, al Mar de Japón, agregó el Yomiuri. Los funcionarios de la agencia no pudieron ser contactados para que comentaran sobre estas informaciones.
Misako Kaji, portavoz del Primer Ministro de Japón, Junichiro Koizumi, dijo a Reuters que las acciones recientes de Corea del Norte -como la expulsión de los inspectores de armas nucleares de la ONU- eran "extremadamente lamentables".
"El gobierno japonés mantiene consultas cercanas con Estados Unidos, Corea del Sur y el (Organismo Internacional de Energía Atómica) OIEA", dijo, y agregó que aún los funcionarios de Japón no habían tomado ninguna decisión sobre su política al respecto.
Aunque el gobierno del Presidente estadounidense George W. Bush ha pedido medidas económicas para castigar a Pyongyang, los funcionarios de Estados Unidos se echaron atrás esta semana, al decir que en la actualidad no estaban considerando la aplicación de sanciones.
Restringir las exportaciones hacia Corea del Norte podría ser un golpe serio, ya que las contribuciones de unos 170 mil coreanos en favor de Pyongyang que viven en Japón han sido un respaldo crucial en el pasado.
El gobierno de Japón no publica cifras sobre los envíos hacia ese país, pero en el pasado ha estimado que hasta 200 mil millones de yenes (1.670 millones de dólares) salen hacia Corea del Norte desde Japón cada año. En años recientes los montos han caído por la debilidad de la economía japonesa.
