SANTIAGO.- En el marco de su análisis económico para Chile durante este 2003, el Instituto Libertad y Desarrollo (L&D) pronosticó que éste será el sexto año consecutivo de bajo crecimiento -en torno al 3 por ciento-, por lo que recomendó al Gobierno orientar sus esfuerzos en aprovechar las oportunidades comerciales y perseverar en las metas de eficiencia y austeridad.
"Considerando que lo más probable es que este año la economía mundial dé señales de recuperación, para un país pequeño y abierto al mundo como Chile, las principales recomendaciones son perseverar en sus equilibrios internos, la austeridad del gasto público y la eficiencia en el uso de sus escasos recursos", sostiene la entidad.
Asimismo, L&D observa que el país debe aprovechar las oportunidades de negocios derivadas de la firma de acuerdos comerciales y poner especial énfasis en las reformas que cambien la productividad y aumenten la competitividad, "con el objetivo de marcar una diferencia en relación a la mayoría de los países y persistir en la tarea de llegar a ser un país desarrollado".
Según la entidad, este significativo cambio en el ritmo de crecimiento "no sólo ha modificado las decisiones de consumo e inversión privadas, sino también ha obligado a que la planificación de la administración Lagos sea modificada para considerar una trayectoria mucho más modesta de la proyectada al comienzo de su gobierno".
Así, agrega que la mayor parte de los analistas contiene una proyección de crecimiento para el año en torno al 3 por ciento, lo que si bien es algo mejor que el resultado del 2002, sigue siendo inferior a lo deseado.
"Frente a este panorama y dada la evolución de las variables monetarias y fiscales en el último tiempo, no existe mucho espacio para utilizar un mayor estímulo monetario, por lo cual deberían tener una gran prioridad las reformas que puedan cambiar la productividad", indicó.