SANTIAGO.- La industria del vino exportó en 2002 un volumen de 438,5 millones de litros embotellados y a granel, con un valor de 601 millones de dólares, superando los niveles del año anterior, informó este lunes Viñas de Chile.
Los embarques físicos superaron en 12,11 por ciento la venta de 2001 y el retorno de divisas creció 1,53 por ciento entre los dos ejercicios anuales.
Los principales destinos de la oferta chilena fueron Estados Unidos, Inglaterra, Canadá, Dinamarca, Alemania, Japón e Irlanda, que compraron 400 millones de dólares en los distintos tipos de vinos, incluidas champañas.
Rusia y China fueron los mercados que lideraron los incrementos más notorios de las colocaciones vitivinícolas del país. Las compras rusas en Chile aumentaron 386 por ciento en su volumen físico y 73 por ciento en su valor. Los negocios con China subieron 115 por ciento y 62 por ciento, respectivamente.
Durante el año, Europa se mantuvo como el mayor consumidor de los vinos chilenos (48,5 por ciento del valor), seguida de Estados Unidos y Canadá(29,95), Latinoamérica (11,1) y Asia (6,9).
Corea del Sur, Grecia y Luxemburgo se sumaron a la lista de clientes con expectativas de pedidos "interesantes", dijo la gerente de la institución, Elizabeth Díaz.
La producción nacional de vinos en 2002 alcanzó a 541 millones de litros.
En 2003, el volumen elaborado crecería al menos un 20 por ciento, según la estimación provisoria de Viñas de Chile.
Chile tiene hoy 23 valles vitivinícolas a distintas alturas sobre el nivel del mar, entre el Pacífico y la Cordillera de Los Andes, entre los paralelos 27 y 38 sur.
Nuevas plantaciones están acercando la superficie de viñas a las 100.000 hectáreas, desde las 75.000 de la década pasada, según informes del Ministerio de Agricultura.
Aunque con embarques aún pequeños dentro del contexto mundial, Chile compite con Australia y Argentina entre los mayores exportadores de vinos desde el hemisferio sur.
