SANTIAGO.- La Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), en su informe trimestral, indicó que el fin de la guerra en Irak y la concreción de medidas para ajustar la producción del metal por parte de las empresas, hacen pensar que su precio tenderá a mejorar durante los próximos meses.
Según la entidad, la libra del mineral se transará entre US$0,75 y US$0,72 en el corto plazo, lo que permitirá cerrar el año en el rango inicialmente proyectos, esto es US$0,74 y US$0,78.
La Comisión precisó que las perspectivas del mercado para el resto del año están asociadas por una parte, a consideraciones propias de la industria, principalmente a las acciones de las empresas destinadas al control de producción en el corto plazo –disminuciones de producción y política de apilamiento- y control de inversiones.
Además, el mercado seguirá condicionado a la incertidumbre del comportamiento de la demanda, en sus dimensiones geográficas, principalmente Estados Unidos, y sectoriales.
En cuanto al accionar de las compañías productoras, Cochilco indicó que en los próximos meses debiera comenzar una evaluación profunda de los compromisos asumidos con sus inversionistas y el real impacto de las acciones de recortes y apilamiento sobre las variables reales como precios, inventarios y premios.
Al respecto, Cochilco señaló en su informe que espera que las disminuciones de producción anunciadas por BHP Billiton y Grupo México refuercen el nuevo nivel de precios.
En cuanto a los factores propios del mercado, Cochilco resaltó que durante este año el cobre ha debido enfrentar un panorama deprimido y agravado por la evolución del conflicto bélico en Irak y sus efectos directos e indirectos sobre los mercados.
El trimestre estuvo marcado por las fuertes fluctuaciones del precio del petróleo, las cifras desalentadoras sobre los alcances de la recuperación de la actividad económica mundial y sus efectos encadenados a través de cambios de expectativas del comportamiento global y sectorial.
Cochilco asevera que de acuerdo a la última información disponible, correspondiente a enero pasado, el consumo global da solo señales débiles de recuperación. Las cifras proyectadas siguen la tendencia de los últimos años, caracterizadas por un permanente crecimiento de China y Corea del Sur y por una reducción –que esperamos sea leve- desde Estados Unidos y los países de la eurozona.
En particular, destaca la alta tasa de crecimiento de China- en niveles similares a los últimos años (20 por ciento)-, y el bajo desempeño de Estados Unidos (-2 por ciento).
En el primer caso, la información disponible del sector industrial -y sus proyecciones- confirman la continuidad de su larga y profunda fase expansiva, lo que en conjunto con el dinamismo del sector electrónico y vial, permitirían que la demanda siga en similares niveles a los observados sistemáticamente hace ya varios períodos (18%).