SANTIAGO.- El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Andrés Santa Cruz, aclaró que su apoyo a la eliminación gradual de las bandas de precio, propuesta por el Ejecutivo, se debe a una visión de futuro, ya que -explicó- la medida está inserta en el TLC con EE.UU. y, por lo tanto, es seguro que será aprobado por el Congreso a pesar de la actual oposición de la mayoría de los parlamentarios.
La iniciativa del Gobierno tuvo como origen el fallo de la Organización Mundial de Comercio (OMC) que obligó a Chile a fijar parámetros más transparentes para los precios que pagan el trigo, el azúcar y las oleaginosas al ingresar al país.
En lo esencial, contempla la mantención del actual piso de las bandas hasta el 2008 y una posterior desgravación progresiva del sistema hasta su desaparición en 2014.
Su presentación provocó reacciones de los sectores involucrados, lo que significó un quiebre entre los agricultores de la zona central que apoyan la iniciativa y los del sur, que se oponen tajantemente y cuentan con el apoyo de 75 parlamentarios.
Santa Cruz, en conversación con radio Agricultura, dijo que apoya la medida del Gobierno, ya que le parece "razonable", aunque "no óptima".
"No es lo que quisiéramos, pero al hacer un análisis informado y profesional al respecto nos damos cuenta que estamos a las puertas de un TLC con EE.UU. que va poner la fecha de término a las bandas de precio y, por lo tanto, esta propuesta recoge lo que va a ocurrir cuando se apruebe el TLC", comentó.
Por esta razón, indicó que la posición de los parlamentarios es "populista y poco seria", ya que no está mirando hacia el futuro.
"En el futuro, cuando se vote por el TLC, el cual que contempla la desaparición de las bandas de precios, va a primar la cordura y el Parlamento chileno va a terminar por aprobar la medida", explicó el dirigente.
Respecto de los sectores que critican su apoyo a la eliminación de las bandas de precios y señalan que es una postura que no representa a la totalidad de los agricultores, Santa Cruz recordó que su responsabilidad "es decir la verdad", lo cual "tiene un costo".
"Me encantaría poder ofrecerles un mundo de fantasía (...) pero mi deber es advertirle a los nuestros qué es lo que va a pasar en un futuro próximo. Eso es lo que estoy haciendo", recordó.