SANTIAGO.- El presidente del Banco Central, Vittorio Corbo, sostuvo que la variación de 2,5% registrada por el Imacec en mayo, no constituye "una sorpresa", por cuanto se anticipaba que el segundo trimestre del año sería más débil y ello se explica por "una economía internacional que también tiene un segundo trimestre en que la reactivación se ha ido postergando", al tiempo que estimó que este año la economía chilena crecerá de 3% hacia arriba.
Las afirmaciones las formuló luego de intervenir en un encuentro organizado por la Asociación de Ingenieros Comerciales de la Universidad de Chile (ICU), oportunidad en la cual abordó el tema "Economía Mundial: repunte o recesión", y destacó que en gran medida el crecimiento mundial depende de la reactivación de Estados Unidos, lo que debería materializarse en el segundo semestre del año.
La autoridad monetaria indicó que según "los antecedentes que maneja el Banco Central y que la economía el segundo trimestre, dados los problemas que hemos visto en Asia y en la economía mundial, se ve un poco más débil que el primer trimestre", por lo cual manifestó que la cifra no sorprende en absoluto.
En todo caso, estimó que la economía chilena crecerá este año de 3% hacia arriba, mientras que el 2004 debería ser mucho mejor, con una expansión sobre 4 por ciento.
Corbo recordó que en un mundo cada vez más globalizado, gran parte de lo que ocurre tiene efectos en las distintas economías y en ese sentido, precisó que actualmente la Unión Europea y Japón se encuentran estancados, mientras que algunas economías emergentes están en recesión.
Sin embargo, advirtió que en gran medida, la reactivación mundial depende de Estados Unidos, que representa el 20 por ciento de la economía mundial.
"Por lo tanto, es crucial lo que ocurra en ese país", dijo.
Asimismo, destacó que para Chile es muy relevante, ya que todo incide en los precios de las exportaciones, y nuestro país exporta actualmente un 22% del total de embarques a EE.UU. y Canadá, un 20% a Europa, 18% a Asia y el resto a América Latina.
Corbo manifestó que hay una serie de elementos que muestran una incipiente recuperación en la economía norteamericana, sin embargo, advirtió que hay riesgos, ya que una postergación de este proceso implicará ajustes en el mercado bursátil y problemas en ese país, considerando que su déficit en cuenta corriente es de un 5% del PIB, en tanto que el dólar se ha depreciado en 37 por ciento respecto del euro.
En cuanto a las proyecciones de crecimiento mundial, señaló que las proyecciones apuntan a un 2,2% para Estados Unidos este año, y 3,5% el 2004, para Europa un 1%, que podría ser inferior, cercano a 0,5% y 2,3% el 2004, mientras que para América Latina la expansión el 2003 se estima en 2,8% y para el 2004, 3,8%.
Respecto de los principales socios comerciales de Chile, indicó que las estimaciones apuntan a un crecimiento este año de 2,2% y para el próximo, en torno a 3,4%.
En otro ámbito, se refirió a la preocupación de algunos sectores frente a una eventual deflación y en ese sentido, para el caso chileno le restó dramatismo, ya que "en Chile este riesgo es prácticamente nulo, salvo que algunos quieran inventar un problema", dijo.
Al respecto, recordó que los salarios y otros precios de la economía están ajustados por UF, existe un tipo de cambio flexible y además el Banco Central está atento a cualquier brote de inflación, ya que resulta tan negativo un aumento a 3% como una baja a 2%.
Sin embargo, señaló que toda deflación significa un problema, que en Estados Unidos podría advertirse si se retrasa la recuperación, por cuanto implica afectar la intermediación financiera, así como las expectativas de consumo y la efectividad de la política monetaria, ya que no es posible bajar la tasa de interés más allá de cero.
