BUENOS AIRES.- Argentina tiene "vocación" de acordar con el FMI, pero no aceptará metas que pongan en riesgo la leve recuperación económica, dijo el lunes el ministro del Interior, Aníbal Fernández, a 24 horas de un vencimiento impostergable con el organismo por 3.151 millones de dólares.
"El gobierno argentino tiene vocación de llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero no se aceptarán condiciones que pongan en riesgo la incipiente recuperación económica del país", afirmó Fernández en declaraciones a varias radios porteñas.
El gobierno del presidente Néstor Kirchner espera en las próximas horas una señal del organismo para concretar un entendimiento de reestructuración de los vencimientos con los organismos internacionales por al menos 12 meses.
De no existir consenso para el acuerdo, Argentina podría caer en cesación de pagos con el FMI, que se sumaría al ’default’ que arrastra desde diciembre de 2001 con los acreedores privados.
Fernández dijo que este lunes "continuarán las negociaciones" con el FMI, pero se abstuvo de difundir detalles al señalar que ello podría "conspirar" contra un eventual acuerdo.
Kirchner estaba reunido la mañana del lunes con el titular del Banco Central, Alfonso Prat Gay. Aunque no se difundió información oficial sobre el encuentro, medios de prensa lo relacionaron con las conversaciones en marcha con el Fondo.
Las diferencias entre Argentina y el FMI son por el nivel de superávit fiscal, las tarifas de los servicios públicos y la compensación a los bancos por la devaluación de 2002.
La nación sudamericana propuso elevar el superávit fiscal de 2,5 a 3% para 2004, mientras el FMI reclama un aumento gradual para llevarlo a 4,5% en 2006.
El gobierno de Kirchner se opone además a un aumento inmediato de las tarifas de los servicios públicos que demandan las empresas privatizadas, a la vez que el tercer punto de discordia es el nivel de compensación a los bancos por la devaluación del peso en un 65% desde enero de 2002.