BRUSELAS.- El Consejo de Ministros de Agricultura de la UE aprobó hoy formalmente la reforma de la política agrícola común (PAC), acordada el pasado mes de junio.
Los ministros ratificaron, con el voto de Portugal en contra, los siete reglamentos de la reforma agrícola, que tiene como cambios principales la modulación -recorte gradual de las ayudas directas- y la introducción de un sistema de ayudas que se pagan por hectárea o explotación, que se conceden independientemente de la producción.
Los responsables agrícolas de la UE acordaron esta reforma el pasado 26 de junio, tras largas negociaciones y debates que duraron prácticamente un año.
Los reglamentos aprobados hoy tratan sobre ayudas directas, medidas de desarrollo rural y las regulaciones de mercado de cereales, forrajes, leche y arroz.
La reforma prevé la sustitución de las ayudas a la producción por un sistema de pago único por hectárea o explotación, basado en referencias históricas.
Este sistema se empezará a aplicar en 2005 pero si un Estado miembro necesita un período de transición lo podrá poner en marcha en 2007: la desvinculación de las ayudas de la producción podrá hacerse por regiones o a nivel nacional.
Además, según sectores la desvinculación de las ayudas podrá ser total o parcial, de forma que una parte de las subvenciones permanezcan ligadas a la siembra o a la cría ganadera.
Otro punto principal de la reforma es la modulación, es decir el recorte de las ayudas directas, que será del 3 por ciento a partir de 2005, del 4 por ciento en el 2006, y del 5 por ciento en el 2007.
Además, Canarias y otras regiones ultraperiféricas de la UE quedan excluidas de la modulación y de la desvinculación.
Portugal rechazó hoy la reforma, al igual que en junio, por no obtener el aumento de cuota láctea solicitado para las islas Azores.