GINEBRA.- Aquejada por una grave crisis económica, la peor en más de una década, Latinoamérica sufrió en 2002 una fuerte contracción de su comercio tanto de mercancías como de servicios, según un informe publicado hoy en Ginebra por la Organización Mundial del Comercio.
Las importaciones tanto de mercancías, con una caída del 7 por ciento en valor (-13 por ciento si se excluye a México), como de servicios comerciales (-9 por ciento) registraron su mayor descenso desde la crisis de la deuda de la región, en 1982/83, señala el informe, titulado "Estadísticas del Comercio Internacional 2003".
A su vez, las exportaciones de mercancías no crecieron en valor y sólo un 2 por ciento en volumen mientras que el valor de las exportaciones de servicios comerciales se redujo en un 4 por ciento.
La combinación de factores como las turbulencias financieras de los países de Mercosur, una retracción de la inversión extranjera, los conflictos de Venezuela y Colombia y la caída del turismo contribuyeron a un descenso del 0,8 por ciento del PIB de la región (-1,3 por ciento sin México).
El subempleo aumentó en la región, cayó la renta per cápita en la mayoría de los países mientras que el déficit por cuenta corriente se redujo fuertemente debido al descenso de las importaciones y de los flujos de capital extranjero.
A despecho de la crisis latinoamericana, el comercio mundial se recuperó ligeramente en 2002 de la fuerte contracción (-1.5 por ciento) sufrida el año anterior aunque sólo creció un 3 por ciento en términos reales, aproximadamente la mitad de la media anual de la pasada década, según ese informe.
La moderada recuperación mundial se vio facilitada por la fuerte demanda de importaciones en los países en desarrollo de Asia, las economías en transición y Estados Unidos, al tiempo que se resintió de la crisis latinoamericana.
Por grupos de productos, las exportaciones latinoamericanas se comportaron de modo muy distinto, y así las ventas de productos de minería - sobre todo combustible-, maquinaria y equipo de transportes cayeron un 2 por ciento mientras que las de productos agrícolas crecieron un 4 por ciento por el aumento de los precios de las materias primas.
Los productos agrícolas y mineros representaron aproximadamente un quinto y las de equipos de transporte, un tercio, del total de exportaciones latinoamericanas de mercancías, mientras que las exportaciones de artículos de confección y productos siderúrgicos crecieron un 2 y un 19 por ciento respectivamente.
Por destinos, las exportaciones latinoamericanas mostraron un fuerte contraste entre la contracción del 10 por ciento sufrida por el comercio intrarregional y el 3 por ciento de crecimiento de las exportaciones a otras regiones.
Así, las ventas a Norteamérica y a Europa Occidental crecieron sólo un 2 y un 3 por ciento respectivamente mientras que las exportaciones a los países en desarrollo de Asia, África y Oriente Medio lo hicieron en más de un 10 por ciento aunque partiendo de cifras muy inferiores.
Así, estas tres últimas regiones recibieron, sin embargo, sólo un 8 por ciento de las exportaciones latinoamericanas mientras que Norteamérica y Europa Occidental representaron un 12 y un 61 por ciento respectivamente del total.
Más de la mitad de las exportaciones de servicios comerciales de América Latina son ingresos por turismo, la mayor cuota de todas las regiones, por lo que la caída experimentada por el turismo mundial en 2002 tuvo allí repercusiones especialmente negativas.
Los ingresos de ese sector se redujeron en un 3,5 por ciento, pero otras exportaciones de servicios comerciales cayeron el doble, sobre todo debido a la contracción de los intercambios entre los propios países de la región.
El informe de la OMC destaca otros fenómenos como la fuerte concentración del comercio latinoamericano: cinco de los treinta y cinco países de la región contribuyen a más de dos tercios del total de intercambios.
Por otro lado, las economías más pequeñas como las del Caribe anglófono registran muchas veces un mayor comercio per cápita que las grandes.
Pese a que una mayoría de países latinoamericanos sufrieron una caída de las exportaciones de mercancías y servicios comerciales, un pequeño grupo tuvo un buen comportamiento pese a la crisis regional.
La OMC destaca así a Costa Rica, Ecuador y Perú, en la exportación de mercancías, y Ecuador, Guatemala y Panamá, tanto en la importación como exportación de servicios comerciales.