BUENOS AIRES.- Argentina confía en que Estados Unidos le dé su apoyo una vez más en la tensa negociación que mantiene con el Fondo Monetario Internacional (FMI), dijo el lunes el jefe de Gobierno, Alberto Fernández.
La relación entre Argentina y el organismo atraviesa una etapa de turbulencias desde que el Presidente del país, Néstor Kirchner, acusó al Fondo de retrasar la aprobación de la primera revisión de un acuerdo de 12.550 millones de dólares, firmado en septiembre.
Según Kirchner, el FMI le presiona para que mejore la oferta de reestructuración de la deuda pública por 88.000 millones de dólares sobre la que el país declaró el incumplimiento del pago a fines del 2001.
El ministro de Economía, Roberto Lavagna, y una fuente cercana a la negociación dijeron la semana pasada que ésa es una de las principales preocupaciones del organismo.
Pero Fernández afirmó que el gobierno espera que, tal y como ocurrió en septiembre cuando Estados Unidos impulsó la aprobación del acuerdo con Argentina pese a la resistencia europea, en este nuevo enfrentamiento la administración de George W. Bush vuelva a ayudar al país.
"Cuando eso ocurrió, Estados Unidos y los directores de Estados Unidos (en el Fondo) acompañaron a la Argentina. No encuentro ningún motivo para que así no ocurra nuevamente", aseguró el funcionario citado por la agencia estatal Télam.
En la perspectiva del gobierno, todas las metas fiscales y monetarias al 31 de octubre están cumplidas, por lo que el FMI no debería demorar la aprobación de esa primera revisión.
De ella dependen desembolsos que el país debía recibir para cancelar deudas con el propio organismo. Hasta marzo no habrá vencimientos por montos altos, lo que permitiría al país pagar con sus reservas los próximos vencimientos mientras espera la aprobación.
En la visión del FMI, según dijo una fuente cercana a las negociaciones, Argentina tiene que acelerar el proceso de reestructuración de deuda y la renegociación de los contratos con empresas de servicios públicos, así como también la aplicación de reformas en el sistema financiero.
El FMI es duramente criticado por los acreedores de Argentina, que están furiosos porque el país ofreció pagarles 25 centavos por cada dólar que les debe.
Según los tenedores de bonos argentinos el FMI firmó un acuerdo con el país que le garantizó el cobro de toda la deuda que Argentina acumula con el organismo pero que los dejó sin ninguna garantía de que recuperarán sus inversiones.