BUENOS AIRES.- El cierre parcial de 11 mercados internacionales a la carne argentina por un brote de aftosa asesta un "golpe fuerte" al sector ganadero nacional que según estimaciones privadas, perderá el 20% de las exportaciones.
El presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luciano Miguens, afirmó hoy que "la salida del mercado externo influye y va a dar un golpe fuerte" al sector que en 2005 exportó por 1.400 millones de dólares.
Rusia, primer comprador, cerró el viernes su mercado a las carnes provenientes de la provincia de Corrientes (noreste) donde las autoridades sanitarias intervinieron ocho departamentos tras el hallazgo de 70 bovinos infectados en un establecimiento del norte a 25 kilómetros de la frontera con Paraguay.
La lista de mercados restringidos se completa con Chile, Israel -segundo y tercer comprador- Brasil, Colombia, Perú, Uruguay, Paraguay, Guatemala, Singapur y Sudáfrica.
Se espera que la semana que viene la Unión Europea anuncie iguales medidas, lo que representa un recorte del mercado donde se exportan los llamados cortes Hilton, los de mayor precio y calidad.
Para el titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Mario Llambías, la pérdida de mercados internacionales ya resta a las ventas externas "un 20% que ahora irá al mercado local", lo que morigerará el impacto en el bolsillo de los productores ganaderos.
De todos modos la preocupación persiste por la pérdida del estatus de país libre de aftosa con vacunación que Argentina había recuperado en 2003 luego de la crisis sanitaria de 2001.
Los ganaderos confían en que el plan de emergencia puesto en marcha por el Servicio de Calidad Animal y Agroalimentaria (SENASA) circunscriba el brote para que no avance hacia las poderosas provincias ganaderas de Santa Fe y Buenos Aires, donde se concentra la mayor parte del rodeo argentino.
"Tenemos esperanzas de que los cierres (de mercado) sean lo más cortos posibles", dijo Miguens a radio Mitre al confiar en que "si se acota a Corrientes, en una 'esquina' del país, habrá una respuesta favorable rápida" que permita recobrar mercados perdidos en los próximos dos meses.
El dirigente descartó que se trate de una introducción intencional de la enfermedad para forzar a volcar más carne al mercado interno y lograr con ello una baja de los precios, algo por lo que el gobierno viene pugnando en el marco de un plan para contener la inflación y a lo que se resistían los ganaderos.
"Es muy difícil organizar una cosa así e impensable por sus consecuencias para el país", opinó.
El Presidente Néstor Kirchner enfatizó el viernes que su gobierno "quiere que baje el precio de la carne, pero no por la aftosa".
Miguens estimó que la aparición de la enfermedad en una zona que estaba bajo vigilancia sanitaria puede deberse "a una mutación del virus o a un ingreso de hacienda no controlado" al establecimiento donde se detectó el foco.
Llambías remarcó al respecto que "el virus apareció en una región donde en diciembre los estudios afirmaron que no había presencia de la enfermedad" y calificó como "sorprendente" una falla en la cobertura de la vacunación en una zona que por su cercanía a la frontera se considera de alto riesgo.
Fuentes del SENASA confiaron que la investigación del organismo se orienta a un episodio de contrabando de hacienda infectada.
